El Madrid tuvo la victoria en su mano en Moscú (91-90)

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El Real Madrid se fue de Moscú con sensación de frustración por el desarrollo de un partido en el que pudo haber ganado de no ser por su flojo segundo cuarto. Plantó cara al CSKA en Moscú con un gran arranque pero un 12-32 le hizo ir a remolque el resto del encuentro, en el que a punto estuvo de culminar la remontada. Llull (21 puntos), Doncic (9+8 rebotes) y Maciulis (11 puntos), fueron los más destacados del conjunto blanco

El Madrid entró muy serio en el partido. Su quinteto, sacrificando centímetros por fortaleza con Doncic, Llull, Maciulis, Reyes y Ayón, firmó unos siete primeros minutos casi perfectos. La defensa de cambios automáticos, que anuló a De Colo y obligó a Itoudis a meter en pista a Teodosic en el minuto 3, y el dominio en el rebote ofensivo llevaron a los visitantes a un 8-21 en el 7´. Maciulis, con 9 puntos, fue el referente en el primer cuarto (17-26, min. 10).

Kurbanov despierta al CSKA
Con su entrada y la de Hines, los locales mejoraron en agresividad y empezaron a ganar la partida a los blancos en el rebote y en defensa. Kurbanov fue el interruptor que activó a su equipo (9 puntos). De Colo le siguió y se convirtió en una pesadilla para la defensa del Madrid, que encajó 32 puntos, 16 de ellos del francés, en un aciago segundo cuarto. Un 16-0 de arranque lastró al conjunto que dirige Laso, en el que Doncic (9) y unos buenos minutos de Nocioni impidieron que la ventaja moscovita fuera a más al descanso (49-38, min. 20).

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El orgullo madridista estaba herido. Agravado con la máxima del CSKA de +14 en el ecuador del tercer cuarto (59-45), apeló a una mezcla de talento y esfuerzo para no irse del encuentro. Un 8-0 de parcial con dos triples de Llull y la determinación de Carroll redujeron la diferencia por debajo de los diez puntos. No lograron culminar la remontada pero sí dejar el marcador en 73-68 antes del último cuarto.

Máxima igualdad
Draper y Randolph, uno en defensa y otro en ataque, ponían el 73-71 en el 31´. Tensión máxima y partido nuevo. Teodosic volvió a despegar al CSKA, que cogía una renta de +9 a seis minutos. Rudy respondía con dos triples y el Madrid, a base de defensa, colocaba el 85-82 en el 37´.

Pudo ganar
En el siguiente minuto no se movió el marcador y eso que los blancos tuvieron varios tiros cómodos para hacerlo. Los locales entraron en el último minuto y medio con 87-82. El Madrid no perdió la fe y con Ayón como protagonista puso el 87-86 a 26 segundos. Sin embargo, en una locura de final, el CSKA sentenció el partido desde la línea de personal (91-90, min. 40).

CSKA DE MOSCÚ 91 (17+32+24+18): Jackson (0), Fridzon (9), De Colo (28), Vorontsevich (2) y Augustine (3) – cinco inicial- Teodosic (15), Kurbanov (13), Antonov (0), Higgins (6), Khryapa (5), Hines (10) y Kulagin (-).

REAL MADRID 90 (26+12+30+22): Doncic (9), Llull (21), Maciulis (11), Reyes (7) y Ayón (10) -cinco inicial- Rudy (6), Taylor (-), Nocioni (3), Carroll (13), Randolph (8), Hunter (2) y Draper (0).

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