Movistar Estudiantes asalta la Fonteta con una coral actuación (62-68)

Encuentro entre las antípodas de la Liga Endesa, se enfrentaban segundo contra penúltimo en un encuentro que se antojaba dispar, dada la solidez local de Valencia Basket y la poca consistencia y regularidad de Movistar Estudiante. Los de Valdeolmillos soñaban con una victoria en uno de los feudos más inexpugnables del territorio para acercarse a puestos alejados del descenso…

La bola se lanzaba al aire y Nacho Martin palmeaba para un primer ataque que rubricaba Jaime Fernández desde el triple. Buenas sensaciones iniciales para los jugadores Movistar Estudiantes que eran capaces de circular mejor y encontrar el aro con más facilidad. Se sentía más cómodo en los instantes iniciales el conjunto colegial que se iba hasta los 17 puntos en apenas 5 minutos gracias a Laprovittola y Hernangómez. Los de Pedro Martínez se mostraban erráticos y desconfiados, abusando de opciones exteriores, yéndose al final del primer cuarto con 7 puntos de desventaja (17-24).

El acierto taronja aparecía de la mano de un inspirado John Shurna que aportaba 2 triples y, además, una buena defensa sobre Nacho Martín. El impulso del estadounidense contagiaba al equipo que poco a poco conseguía recuperar sensaciones y se ponía un solo punto por debajo de los del Maetzu. Sin embargo, no cuajaba la remontada y Estudiantes capeaba el temporal para mantener una cómoda diferencia a su favor. Un arreón, de nuevo al filo del final de cuarto, volvía permitir a Valencia Basket recuperar el terreno perdido para afrontar la segunda mitad con el marcador igualado a 37 puntos.

Por el túnel de vestuarios salía un confiado Movistar Estudiantes que apostaba por la defensa para conseguir la victoria. Un triple de Lucic daba la vuelta al marcador por primera vez en casi 25 minutos de partido, los taronja por delante y el miedo en el conjunto visitante. Pese a ello, los colegiales mostraban el carácter y revertían de nuevo la situación, con situaciones inverosímiles como un triple de 9 metros de Salgado y otras más corales. Esta tendencia llevaba los nervios a la afición congregada en La Fonteta que con tímidos silbidos mostraba su discrepancia con el juego mostrado y la endeblez defensiva y en el rebote. Tímida reacción taronja que revertía la discrepancia de opiniones del público y se sumaban a la causa liderada por sus jugadores que mostraban más intensidad y acierto.

No conseguía dar con la tecla adecuada Pedro Martínez que veía como ninguno de sus directores aportaba la claridad de ideas para mejorar el juego colectivo. Ni Vives, ni Diot, ni Stefansson vivían su mejor partido. La última bala en la recamara de Valencia Basket se cargaba a través de los problemas colegiales con las faltas personales que propiciaban visitas reiteradas en los últimos instantes a la línea de tiros libres. Sin embargo, el partido no acaba sin un sobresalto final, Romain Sato anotaba una canasta desde la esquina que servía para poner a los taronja a un punto pero se lesionaba al golpearse contra la valla en el tobillo izquierdo.

Tras este incidente, un tapón de Sikma a Nacho Martín que no culminaba el estadounidense al perder el siguiente balón en ataque. A la postre, el que más lo mereció se llevó la victoria. Estudiantes sumaba un triunfo transcendental en una cancha poco propicia para sorpresas visitantes.

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Por Vicente Roselló (@elentevicente) / ACB Photo/ M.A.Polo

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