Sólo 4 partidos esta madrugada en la NBA, en los que destacan la exhibición de Russell Westbrook, que encadenó su quinto triple-doble seguido, igualando la cifra de Jordan en 1989. Gentileza de fullbasket.es
Estamos viviendo algo histórico. No hay más. No pueden aparecer detractores porque no se los merece. Asumir el peso de toda una franquicia, olvidar la “traición” que para muchos supuso el adiós de Durant a Oakland y ponerse manos a la obra, sin miedo al horizonte, sin temor a los obstáculos en medio del camino. Russell Westbrook va camino de firmar una de las mejores temporadas de toda la historia en la NBA. No sólo porque Robertson fuese el único en promediar un triple-doble, sino porque pocas estrellas han sido capaces de tener un impacto tan grande dentro de una franquicia.
Westbrook firmó su quinto triple-doble consecutivo, esta vez de 28 puntos, 17 rebotes y 12 asistencias, que le permitió a los Thunder ganar 101-92 a los Pelicans. La racha de Westbrook no la había conseguido nadie desde que Jordan lograra tales partidos seguidos con números de dos dígitos en puntos, rebotes y asistencias. Junto a Westbrook, que ya tiene también 10 triples-dobles en lo que va de temporada, y 47 como profesional, Enes Kanter también logró doble-doble de 17 puntos y 10 rebotes decisivos. El 37+15 de Anthony Davis se quedó sin recompensa y los Thunder ya acumulan 5 victorias seguidas.
Ha mejorado Orlando su faceta defensiva, y el paso adelante de Ibaka, unido al regreso de Meeks (un seguro de vida desde el banquillo) han cambiado ligeramente a los Magic, que ganaron anoche en Detroit 92-98 gracias a una ventaja que cogieron en el segundo cuarto y supieron conservar en la segunda parte. Ibaka acabó con 21 puntos, 7 rebotes, 4 asistencias, 3 robos y 4 tapones, amargando el regreso de Reggie Jackson al quinteto titular de los de Detroit, que volvieron a acusar la poca presencia de Drummond en la pintura.
Algo ha cambiado en New York. No sólo por el juego (más efectivo que antaño), sino por las sensaciones que transmite el equipo en pista. Defensa coral y ataque solidario. Y el Madison es cada vez un feudo más inexpugnable (9-3). Aunque los Kings estaban en el partido a falta de seis minutos pese a no estar acertados en ataque (tuvieron que remontar una desventaja de 18 puntos), Jennings y Melo (20) acabaron con el sueño de los californianos (106-98). Cousins (36+12+4) fue nuevamente la piedra angular de Sacramento, que acusó la poca aportación de la segunda unidad y también el 9 de 30 de Boogie. Porzingis (15+14) sigue siendo fundamental y Willy (4+4+3 en 12 minutos) aprovecha las oportunidades.
Los Clippers de siempre han vuelto. Los que destacan por ser un equipo capaz de bajar al fango y luchar como nadie, así como capaz de dejar escapar rentas importantes y perder ante equipos inferiores. El segundo guión fue anoche el protagonista, porque los angelinos cayeron ante los Pacers en casa, un equipo que hasta ahora sólo había ganado un partido lejos de Indiana. Los de McMillan dominaron desde buen comienzo, llegando a obtener rentas de hasta 20 puntos, pero a falta de 2 minutos vieron como los Clippers se pusieron a 4 puntos. Pero entonces llegó Paul George, con un triple, para sentenciar (16+7+5). Del 13-2 al 16-6 los Clippers…
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