Los vascos prometieron pelea y orgullo y la pusieron hasta el último segundo, hasta el último tiro. Un partido de alto nivel que tuvo su final no apto para cardiacos. El Baskonia tuvo el tiro del empate, o de la victoria, primero Larkin que levantándose de tres recibió contacto de Kurbanov, pero los árbitros entendieron que no era falta, y luego Hanga, que recibió un tapón de Hines. Fin de la historia, el CSKA se convierte en el segundo pasajero de la final four
Baskonia comenzó el partido con más energía aunque se estrellaba con el físico de los rusos (9-7). Larkin sumó muy pronto su segunda falta, algo a tener en cuenta dada la importancia del base norteamericano. Beaubois también se cargo de faltas, por lo que el banco tuvo que empezar a funcionar, con Budinger destacando, con 9 puntos en seis minutos. Por parte rusa De Colo no estaba muy activo (24-22).
En el segundo cuarto la intensidad subió mucho, a veces demasiado. Juego trabado, tanganas, enganchones, técnicas, había mucho en juego y se notaba en cada acción. Malo para el Baskonia que de un (29-22) pasó a un (30-34). Los rusos tienen esa capacidad, la de amoldarse a cualquier juego, tienen equipo para ello. Los vascos perdían bastantes balones pero la fe que ponían les permitía mantener el resultado igualado, al descanso (44-43).
Tras la reanudación las cosas se siguieron manteniendo igualadas, solo en tramo final del tercer cuarto, el CSKA empezó a coger rentas con cierta regularidad (63-68). Higgins marcaba la diferencia, De Colo empezó a carburar, y Teodosic le secundaba. En el otro aro Shengelia destapa el jarrón de las esencias, 17 puntos anotó el georgiano, supliendo así la menor presencia en el juego de Larkin y Beaubois, Voightmann también aportaba para la causa (70-72).
Al inicio del último llegó una de las claves del partido, cuando los vascos entraron en una crisis ofensiva que solo le permitió anotar cuatro puntos en siete minutos. Esto les puso 10 abajo en el momento más delicado (74-84). El Baskonia reaccionó con orgullo, el CSKA intentaba contrarrestar con cabeza fría. Cuatro puntos de Larkin puso la diferencia a dos a pocos segundos para el final (88-90). El CSKA tenía la última posesión pero De Colo perdió el balón. Con seis segundos los vascos tuvieron su oportunidad para alargar la serie y llegamos a las dos citadas acciones, tapón de Hines a Hanga y Larkin no pudo superar la defensa de Kurbanov en el triple final.
Shengelia (19 puntos 7 rebotes), Budinger (15 puntos 8 rebotes), Larkin (13 puntos 5 asistencias), Hanga (13 puntos 6 rebotes) y Blazic (10 puntos), los mejores por parte local. En el CSKA, Higgins (21 puntos), De Colo (15 puntos 5 asistencias), Teodosic (13 puntos) y Jackson (10 puntos).
Foto: EuroLeague Media
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