[4-3] Y de repente Olynyk. Los Celtics se clasifican a la final del Este (105-115)

Thomas brilló con luz propia, pero con eso ya contaban los Wizards. Fue el pívot canadiense, que se marcó un partidazo, quien fue el factor el sorpresa, el que se salió del guión, el que metió a los Celtics, cinco años después en la final de conferencia

Fue el guión de la serie, partido en casa, victoria segura. Con sufrimiento eso sí, Boston cumplió con la premisa y se llevó la cuarta victoria en su cuarto partido como local.

Claves del encuentro para entender la victoria verde, de nuevo, la falta de banquillo de los Wizards, una notable rémora para los capitalinos durante toda la serie, y la irrupción de Kelly Olynyk, con 26 puntos, 5 rebotes y 4 asistencias. Anotando desde donde hiciera falta, por fuera, por dentro, nadie le esperaba y marcó la diferencia.

Thomas, con 29 puntos y 12 asistencias, hizo su partidazo, no faltando a su cita como líder. Bradley, más ocupado en defender a Beal, no se centró en atacar y se quedó en 9 puntos. Smart (13 puntos) destacó desde el banquillo, Crowder (14 puntos) y Horford (15 puntos) aportaron para la causa.

Diversidad de recursos la de los Celtics, que fueron la tumba de los Wizards, que mantuvieron el tipo hasta los últimos minutos, gracias sobre todo a un Bradley Beal, con 38 puntos, que tuvo que mitigar el mal partido de John Wall, 18 puntos con 8/23 en tiro, a pesar de sus 11 asistencias. Porter (20 puntos) y Morris (18 puntos) destacaron, pero con Wall en una peor versión y un banquillo que se quedó en 5 puntos, ejecutaron a los Washington.

Boston: Thomas (29), Bradley (9), Crowder (14), A. Johnson (0), Horford (15) –equipo inicial-; Brown (9), Olynyk (26), Smart (13) y Rozier (0).

Washington: Wall (18), Beal (38), Porter (20), Morris (18), Gortat (6) –equipo inicial-; J. Smith (0), Mahinmi (0), Jennings (0) y Bogdanovic (5).

Estadísticas

Parciales: 27-23, 26-32, 32-24 y 30-26.

TD Garden de Boston. 18.624 espectadores.

Photo NBA Media