Australia, sin problemas ante China (68-93)

17 puntos de Barstow lideraron a un conjunto en el que las estrellas descansaron. Motum, Andersen, Baynes y Broekhoff completaron el triunfo de lo colectivo contra una China en la que solo Yi Jianlian respondió

Australia vivió un día plácido frente a China, permitiéndose reservar a sus principales estrellas. No jugó Bogut y los referentes pudieron vivir muchos minutos relajados desde el banquillo. Y eso que el inicio fue complicado. Juego lento, espeso, errático, nada que ver con lo visto 48 horas antes frente a Estados Unidos. Un pírrico 4-4 en los primeros 4 minutos hasta que Baynes machacó y Bairstow demostró que este sería su día con un triple.

Los oceánicos vencían al final del primer periodo (14-17), pero no se sentían especialmente cómodos en pista y, además, no sabían como para a un Yi Jianlian que hacía estragos en la defensa rival. Ni siquiera con la primera canasta del máximo anotador del torneo, Pat Mills, Australia despertó (29-31, min.15). Pero el propio Mills no desistió y, con la ayuda de Dellavedova, brillante en el pase, Australia cogió carrerilla al final del segundo acto, llegando al descanso con una renta de diez puntos (34-44) que no parecía reflejar lo visto durante los primeros veinte minutos.

Más le dolió aún a China el inicio del tercer cuarto, con Andersen y Dellavedova anotando para un +14 que parecía injusto por los méritos de ambos equipos. Muy pronto Australia se encargó de demostrar que ni era espejismo ni causalidad. Andersen aprovechaba la baja de Bogut y Bairstow disfrutaba en el papel de referente anotador. Ding contuvo en primer momento el despegue definitivo de su rival, aunque los malos porcentajes chinos y la sangría en el rebote a favor de Australia había roto del todo el partido.

Por eso, ni los mismos chinos confiaban en sus opciones cuando comenzaron el último periodo quince puntos abajo (50-65), ya que en el Yi Jianlian-sistema tenía su antitesis en el esquema oceánico, con muchos jugadores repartiéndose minutos y méritos a partes iguales. Baynes fue el último en apuntarse y Lisch, el que con un triple elevó la renta por encima de la veintena, antes de que en la recta final Bairstow confirmara su exhibición y Australia su contundente triunfo por 68-93.

Australia toma fuerza de cara a lo que viene en el horizonte, mientras que China solo se agarra a la calculadora sin creerse la carambola que debería producirse para poder llegar a cuartos.

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Fuente: ACB.COM / Foto: FIBA