Los lucenses ganan por vez primera en la cancha del Barcelona y sale de los puestos de descenso
La contienda se inició con un Barcelona decidido a presionar en todas las líneas, liderado por un Rubio incansable y un Willy imparable que encontraba huecos en la defensa de Sakho. A pesar de los esfuerzos del Breogán por anotar desde fuera, especialmente gracias a Nakic, Brizuela mostraba su agresividad en los contraataques. Los gallegos, por su parte, encontraban principalmente éxito desde la línea de tres puntos, con un triple crucial de Momirov que les otorgaba una ligera ventaja de 13-12.
Nakic continuaba su acierto desde el perímetro, colocando al equipo gallego por delante, mientras que Breogán mantenía su racha desde más allá del arco, culminando con un sexto triple que obligaba a Grimau a pedir un tiempo muerto con el marcador en 18-24 y apenas un minuto por jugar. Un espectacular triple sobre la bocina de Brizuela acercaba al Barcelona a un ajustado 23-26 al final del primer cuarto.
Abrines destacaba con dos penetraciones consecutivas al inicio del segundo cuarto, pero la habilidad de Mclemore permitía al Breogán mantenerse a la cabeza con un marcador de 29-35 a mitad del período. A pesar de los esfuerzos de Abrines, el Barcelona solo había sumado 9 puntos en este cuarto hasta el momento. Sin embargo, una jugada destacada de Jokubaitis permitía al Barcelona revertir la situación con un estrecho margen de 38-37.
El tercer cuarto continuaba con intercambios constantes, con el Barcelona atacando el juego interior y el Breogán confiando en su puntería desde la línea de tres puntos. Hernangomez se destacaba con 18 puntos hasta este momento, mientras que Sakho conseguía una jugada clave para darle al Breogán una ventaja de 65-63 faltando 4 minutos.
El ritmo de anotación disminuía, y en ese momento emergía Parker con un triple crucial seguido de una canasta espectacular en reversa, otorgando una pequeña ventaja de 72-67 al equipo catalán.
García se destacaba como el jugador más activo de los lucenses, con 23 puntos y penetraciones de gran calidad, mientras que Mclemore sumaba puntos desde la línea de tiros libres y con un triple frente a Nnaji. Con un ajustado marcador de 76-77 y 7 minutos por jugar, el Breogán mantenía una ligera ventaja.
El Breogán lograba aumentar su ventaja con una bandeja de Juan Fernandez (80-85). Y cuando la presión aumentaba, Brizuela emergía con un triple crucial que obligaba a Mrsic a pedir un tiempo muerto. Con todo por decidir y solo 2:30 por jugar, el marcador estaba igualado en 85.
Mclemore convertía un importante “dos más uno”, colocando la presión sobre el Barcelona faltando 45 segundos. Los errores se acumulaban en ambos lados de la cancha, y una pérdida de Brizuela entregaba una victoria vital a los lucenses, crucial para su permanencia en la competición.
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