El AS Mónaco se lleva un cara o cruz que vale una final four, 85-84 [3-2]

Cuando la historia parecía inclinarse del lado blaugrana, apareció la sangre fría de Mike James y el despertar estelar de Giorgos Papagiannis para escribir otra página dorada en el proyecto monegasco. El AS Monaco conquistó Barcelona (85-84) en un Game 5 de vértigo y se clasificó por segundo año consecutivo para la Final Four de la Euroliga, donde se medirá a Olympiacos

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El héroe inesperado de la noche fue Papagiannis, excluido en el cuarto partido y decisivo en el quinto con una actuación quirúrgica: 17 puntos en solo 19 minutos, con 4/5 en tiros de dos y un perfecto 3/3 desde el perímetro. “Estuve listo toda la serie. Solo esperaba mi oportunidad”, declaró el griego, quien disputará su segunda Final Four consecutiva tras hacerlo el año pasado con Fenerbahce.

Mike James, con 20 puntos, asumió el papel de ejecutor y firmó la canasta ganadora a 55 segundos del final. A partir de ahí, una sucesión de errores y nervios —con fallos clave de Anderson, Papagiannis y Punter— selló la suerte del partido.

Barcelona, que lideró el marcador en distintas fases del encuentro, no logró rematar una serie en la que llegó a tener opciones hasta el último suspiro. Kevin Punter fue el máximo anotador local con 19 puntos, acompañado por los 16 de Justin Anderson y Willy Hernangómez, mientras que Jabari Parker tuvo destellos importantes en la recta final.

Fue un partido vibrante, de rachas constantes y giros de guion. El Barça mandó en el primer cuarto (19-15), pero Mónaco reaccionó antes del descanso (45-39). Los locales volvieron con fuerza (49-39), pero el conjunto del Principado resistió y entró al último cuarto por delante (65-62).

En el desenlace, Papagiannis encadenó triples decisivos, Parker respondió con clase, y los dos equipos se alternaron el liderato hasta el último minuto. Pero la balanza cayó del lado monegasco, que supo gestionar mejor los detalles en los compases finales.

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