El Barcelona no baja en su contundencia ante el Real Betis (82-53)

Cuesta ver a Sarunas Jasikevicius contento. El lituano siempre pide más. Siempre exige más. Contra el Betis en el Palau, el Barcelona volvió a dar una lección de intensidad que debería dejar satisfecho al técnico. Un monólogo que arrancó en el primer cuarto con Mirotic (23-9) y que quedó sentenciado al descanso

En la reanudación, las diferencias superaron los 30 puntos y el técnico dio minutos a los más jóvenes, que convencieron con su garra y entrega. El anfitrión se mostró voraz en todo momento, con una anotación y una defensa que no deja lugar a dudas: actualmente, el Barcelona es uno de los gigantes del continente.

Mirotic acaparó los focos en los primeros compases del partido. Los siete puntos del Barça fueron suyos y parecían augurar un guión plácido para los culés hasta que Kay y Campbell dieron la vuelta al marcador con dos triples seguidos (7-8, min.3). De todos modos, fue solo un paréntesis en el dominio local. Los de Jasikevicius respondieron con más intensidad y acierto, también desde el perímetro. Bolmaro, Sergi Martínez, entregados a la causa del lituano, y las asistencias y puntos de Calathes sellaron un primer cuarto contundente (23-9).

El Betis no encontraba la fórmula para asaltar la defensa del anfitrión, que rompió sus porcentajes de tiro. Al margen del fortín que dibujó la pizarra de Saras, el acierto de Smits y Heurtel subió la distancia a 20 muy pronto (29-9, min.12). Tímidos puntos de Ndoye y Feldeine, con un triple, no intimidaban la hegemonía del Barcelona. Los azulgrana, con un trabajo coral, mantuvieron las revoluciones y firmaron un luminoso muy ventajoso al descanso (46-22).

Partido roto

En la reanudación quedó claro que las opciones del Betis de remontar el choque eran prácticamente utópicas. Los catalanes salieron con hambre, pese a su gran ventaja. Mirotic seguía liderando la anotación de su equipo, esta vez brillando desde los 6,75 metros.

Dos triples seguidos del montenegrino, que ya sumaba 18 puntos, sacaron los colores al conjunto andaluz, totalmente fuera del choque (56-27, min.24). Las diferencias superaron pronto los 30 puntos y Jasikevicius dio minutos a los menos habituales.

Del Betis no había noticias. Lo más destacable eran los solitarios triples de Feldeine y Spires. Nada de lo que hacía el conjunto visitante eclipsaba el despliegue de intensidad y anotación azulgrana en este tercer cuarto (64-40).

Los últimos diez minutos no dejaban mucho margen para la especulación. El banquillo local se levantó con los primeros puntos de Badio, que se sumaba al festival en un Palau que echa de menos disfrutar en vivo de la mejor versión de su equipo. Todos aportaron e intentaron convencer a su entrenador, que ha llevado al bloque catalán a un nuevo nivel de intensidad.

fuente: marca.com · acb photo