El Casademont despierta y suma una victoria crucial ante el Dinamo Sassari (105-88)

El Casademont Zaragoza ha sumado una importante victoria en Champions League. Era un partido clave hacia la final a ocho. Un total de 300 aficionados han asistido en directo al evento y celebrado el triunfo

El cambio ha llegado. El Casademont Zaragoza, tras un primer cuarto en el que fue tan débil defensivamente como en los anteriores encuentros, ha reaccionado para ganar al Dinamo Sassari y dar un paso de gigante en la Basketball Champions League. A partir del minuto 10, el equipo de Sergio Hernández ha sido superior al conjunto italiano hasta imponerse con autoridad con un marcador de 105 a 88. El jueves, de nuevo en el Príncipe Felipe, que volverá a contar con la presencia de 300 aficionados, el Casademont puede dejar sellado el pase a la Final a Ocho si es capaz de ganar al Nymburk.

Primer cuarto
El partido arrancó con el Casademont Zaragoza tan perdido defensivamente como en los anteriores encuentros. El Dinamo Sassari imponía su ritmo de juego en un intercambio de canastas fáciles en el que pronto se vio que los italianos se sentían más cómodos. Bendzius y Burnell por fuera; Bilan y Happ por dentro… Sergio Hernández no encontraba antídoto para la sangría de puntos en contra y en ataque tampoco había clarividencia.

Solo el dominio bajo el aro de Hlinason -acompañado de algunas acciones aisladas de Ennis y Benzing- sujetó al Casademont en los primeros compases; antes de que la energía italiana se impusiera con el paso de los minutos. El Sassari fue el claro dominador de un primer cuarto en el que se volvieron a aparecer los fantasmas defensivos y finalizó con un contundente 20-31 que requería reacción urgente..

Segundo cuarto
El arranque del segundo fue fulgurante por parte del Casademont, con un mate de Wiley y una bandeja de Ennis que conllevó la reacción del banquillo visitante. El técnico italiano solicitó un tiempo muerto que no surtió efecto. El equipo de Sergio Hernández era otro, y cinco puntos consecutivos de Harris, acompañados de una presión a toda pista que secó a los italianos, cambiaron el sino del partido.

Un nuevo mate de Wiley empató el choque. El parcial para el Casademont era de 15-4 y las sensaciones muy distintas. Hasta el punto de que las 300 personas que acompañaban al equipo desde la grada empezaron a jugar su partido. El Dinamo Sassari se había parado en ataque. Era justo lo que necesitaba el Casademont: sentirse recuperado en defensa y que las decisiones del banquillo, en este caso la defensa a toda pista, al fin funcionaban.

Hacia el descanso los italianos mejoraron algo en ataque, pero el Casademont pudo sostener la igualdad. Ennis y Harris se fueron hasta los 13 puntos; Benzing (ocho puntos por entonces) se sumó a la anotación; y San Miguel, hasta ser sustituido, dirigió con acierto la reacción de un segundo parcial que finalizó con dos bases sobre la cancha (Sulaimon y Javi García) y un marcador de 51-52.

Tercer cuarto
Sergio Hernández mantuvo esa apuesta del doble base en el inicio de la segunda mitad y Sulaimon respondió con ocho puntos consecutivos. En un santiamén, el estadounidense se había colocado al nivel anotador de sus colegas Harris y Ennis en el partido, y el Casademont, que también recibió puntos fáciles con un parcial de 13-9 que le dio la vuelta al marcador.

La peor noticia del arranque de la segunda mitad fueron las dos faltas seguidas cometidas por Hlinason, que tuvo que ser reservado en pleno despegue de su equipo. El Casademont había alcanzado su máxima renta del partido (67-62) y emitía las primeras señales de autoridad, de dominio de las situaciones del partido.

El Sassari se veía obligado a agotar sus posesiones por no encontrar situaciones claras y los de Sergio Hernández, en esa pelea, supieron sacar rédito de la energía de hombres como Wiley o Brussino para obtener una nueva máxima renta (76-65) que al final del tercer cuarto se redujo por una acción de cuatro puntos de los italianos a causa de una técnica señalada a Brussino: 77-69.

Último cuarto
Brussino, con permiso de unos árbitros que permitieron excesivamente el contacto de los italinos, fue el protagonista del inicio del último cuarto. Cinco puntos consecutivos suyos (triple y dos tiros libres) desatascaron el ataque del Casademont en unos minutos en los que la defensa visitante comenzó a imponerse.

El Dinamo Sassari no renunciaba al partido. Los de Pozzecco, a base de insistencia y pelea, fueron reduciendo distancias hasta el punto de que el marcador se apretó (84-79) a falta de cinco para final del partido.

Sergio Hernández paró el partido con un tiempo muerto y se decantó por la vivacidad de Harris y Wiley para defender la zona interior en los momentos cruciales. Por fuera, Brussino, Ennis y Sulaimon amenazaban con el tiro exterior. Por dentro, los ala-pívots atacaban la zona italiana, que hacia final no pudo sujetar las embestidas sorpresivas del atlético quinteto del Casademont.

A falta de dos minutos para la conclusión, la ventaja para los aragoneses era clara (97-81) y en la recta final el marcador se amplió hasta el 105 a 88. Hasta seis jugadores del Casademont (Sulaimon, Harris, Brussino, Benzing, Wiley y Ennis) convirtieron 10 o más puntos en un partido en el que el Casademont ha recuperado la senda del triunfo.

fuente: elheraldo.es · foto: BCL