El Gran Canaria apea al Joventut y se mete en la final de la Eurocup, 89-86

El conjunto de Jaka Lakovic alcanza la final de la Eurocup tras doblega al Joventut en una batalla de poder a poder, resuelta con el apoyo de casi 9.000 aficionados

El Gran Canaria volverá a disputar una final de la Eurocup, como hizo en 2015, aunque esta vez con la posibilidad de celebrar ante sus apasionados aficionados el título que viene codiciando desde hace varias temporadas. El conjunto Jaka Lakovic se deshizo este miércoles del Joventut de Badalona, en un encuentro cargado de momentos emotivos y otros brillantes, para citarse con los turcos del Turk T. Ankara.

El triunfo (89-86) tuvo muchas firmas individuales, desde Inglis, pasando por Diop o Slaughter pasando por un extraordinario Albicy, en una de sus mejores actuaciones ofensivas cargadas de dosis de experiencia. El encuentro lo tuvo todo, con el condimento de la emoción hasta el último minuto, aunque el conjunto isleño logró administrar la renta que supo fabricarse en el segundo periodo y que no llegó a contrarrestrar un gran rival como lo fue el badalonés.

El ambiente en el pabellón, como un mega Centro Insular de los Deportes, avanzaba que se iba a desatar sobre el parqué. Cada pelota era un partido en sí misma por la intensidad y la pasión, conocedores todos los actores de la importancia del billete en juego.

Al Gran Canaria le costó casi tres minutos en abrir su cuenta de puntos, a través de un triple de Slaughter seguido de otro de Brussino. Tan pronto se encendía la mecha del entusiasmo popular como la de una reacción a la respuesta de un rival a la altura del combate.

Los dos equipos jugaron sin soltura ofensiva en el primer cuarto, con alternativas en el tanteador. Era la fase del desgaste y de colocar también los cimientos del camino por donde se podría desenvolver el partido.

Cuando el Granca apretaba en defensa ya había un plus. Y si el danzarín Inglis completaba la acción siguiente, el equipo local podría disfrutar de esa primera brecha con la que llegó al cruce de los diez minutos (18-16).

No estaban todas las cartas sobre la mesa, pero sí las propuestas. De ello siguió percatándose un encendido aficionado local, que siguió subiendo los decibelios de sus mensajes de aliento. Un dos más uno de Benite, seguido de una súper canasta de Bassas y otro movimiento perfecto de Inglis bajo el aro llevó el marcador al 26-17 provocando el parón de Carles Durán para hablar con los suyos.

La respuesta de la Penya fue rápida y Lakovic tenía también que pedir tiempo muerto apenas un minuto después, tras el recorte 0-4 para los visitantes. Había detectado una vía y el esloveno no quería malograr esa jugosa avanzadilla en el marcador. Ese objetivo no lo logró, porque el Joventut salió de su laberinto subiendo un peldaño la intensidad en defensa. Se acercó hasta el 31-30 y reinició el encuentro tras superar el primer momento delicado de la noche.

El público no estaba dispuesto a conceder nada. Protestó como nunca una polémica falta de Slaughter a Guy (patinó en la pista) y segundos después reclamó mayor sanción a una cometida sobre Oliver, que no concedieron los colegiados.

Un triple de Guy (38-39) devolvió la cabeza de la carrera al Joventut, a falta de algo más de un minuto para el descanso. Ese punto de ventaja lo conservó hasta el descanso.

El tercer cuarto comenzó con un intercambio de canastas bajo tableros y algunos errores en los lanzamientos exteriores. De tú a tú. Tomic tenía serios problemas con el marcaje de Diop, que no solo era capaz de taponar uno de sus intentos, sino que además el senegalés se metía bajo tablero para matar con su enérgica aportación.

Fue una fase con varios triples importantes, de Slaughter, luego Shurna y especialmente Albicy, sobre la bocina, para poner el 57-54 que fue preludio de un nuevo despegue del Gran Canaria hasta 9 puntos de renta otra vez.

Con 65-56 comenzó el último cuarto. La guerra de nervios seguía, aunque el Gran Canaria tenía unos pasos por delante que debía administrar ante una oleada final del Joventut, que se jugaba el todo por el todo.

Albicy volvió a colocar un triple in extremis, para colocar el 77-70 a menos de tres minutos. Y el base francés anotó dos tiros libres más para volver a situar el +9 (79-70) con el reloj a todo galope para el final del encuentro. Fue prácticamente el tiro de gracia.

El Joventut tenía muchas prisas. Se acercó de nuevo, apretando dientes, inquietando hasta colocarse a dos puntos (85-83). Pero el Gran Canaria no perdió el sitio y supo dosificar hasta el bocinazo final, con la puntería de Brussino en la línea de tiros libres cuando los verdinegros estaban en plan kamikaze. Terminó el partido y siguió la fiesta que se prolonga al menos hasta el miércoles de la próxima semana.

Gran Canaria: Albicy (17), Slaughter (10), Brussino (13), Shurna (5), Balcerowski (2) -quinteto inicial-, Inglis (11), Kljacic (-), Bassas (5), Benite (13), Salvó (2), Khalifa Diop (9) y Stevic (2)

Joventut Badalona: Feliz (21), Brodzianski (15), Busquets (0), Parra (12), Tomic (18) -quinteto inicial-, Kraag (-), Guy (9), Ellenson (0), Ventura (0), Vives (7), Rodríguez (-) y Birgander (4)

f: tintaamarilla.es