Sí en la NBA se habla de los Splash Brothers (Stephen Curry y Klay Thompson) en Barcelona se debate de los Catakrac Brothers: delante Tomic y detrás Xavi Pascual. Tras cuatro años juntos en Barcelona, con la cuarto por acabar, su balance de títulos se resume en una Copa, una Liga y una Supercopa… con la Euroliga más lejos que Saturno de Albacete. Y así, nace un nuevo juego: la quiniela para sustituirlos
A Xavi Pascual le vieron sonreír una vez, a Dusko Ivanovic… nunca. El primero asumió el banquillo culé en febrero de 2008 tras el despido del segundo; desde entonces ambos tienen un club de fans que va poco más allá de sus familias.
A riesgo de recibir un latigazo, diré que Pascual no me disgusta. Recibe más críticas de las que merece porque le ha tocado vivir en la era Wiki, digo… Wi-Fi, donde todo se comparte, en especial los smileys coloristas, con sonrisa, guiños y de más, una verbena de alegría digital, de apariencias sin fin desde unas máquinas de presumir llamadas redes sociales donde talentosas personas serias como ellos tienen bien poco que ganar.
Parece que fue un sueño pero no. El día que Ante Tomic llegó al Real Madrid en el curso 2009-10 leí varias alusiones que definían su juego como… “un Toni Kukoc del siglo XXI”, pero la comparación se ha quedado más larga que los brazos de Antetokounmpo.
Me gusta Tomic pero para estar en el banquillo. Le veo como buen pívot de rotación para un equipo grande o como titular en uno medio; en un club pequeño creo que hoy pondría empeño en cobrar y poco más. No se le puede pedir lo que no tiene cierto. De elegancia y talento va sobrado sin embargo es más intermitente que el cometa Halley. Y ya lo dijo aquel: “No hay enemigo pequeño y los partidos duran 40 minutos”.
A Pascual, ¡la leche!, dan ganas de gritar… la llegada de Tomic le hizo daño revisando los datos. Antes de fichar al jugador croata tras jugar cuatro años en el Real Madrid, el Barça de Xavi logró tres títulos de Liga ACB, una Copa del Rey, tres Supercopas y una Euroliga, todo eso en cuatro años, y desde la temporada 2012-13, el Barcelona de estos Catakrac Brothers no suma ni cuatro títulos en cuatro cursos aunque, eso sí, ahora son meritorios líderes de la actual ACB.
Hace un par de semanas, algún diario catalán dedicó reportajes de doble página a las quinielas de cara a un posible relevo para este técnico catalán de 43 años y, le echen o no, ya os aseguro que cada futuro entrenador culé tendrá muy dificil igualar la cifra de títulos de Xavi en sus primeros años, algo que, Tomic, vaya por (del)ante no puede decir.
¡¡¡Zas!!!
Por Xabi Sanmartín C. (@xabisanmartínc)
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