Sumó la séptima victoria en Liga de la mano del tándem Llull-Tavares y se mantiene invicto a domicilio
El Real Madrid hizo valer su condición de mejor visitante de la Liga para sumar una nueva victoria a domicilio, la tercera en esta competición y la sexta en lo que va de temporada contando las tres de Euroliga. Esta vez, se impuso al Montakit Fuenlabrada en un partido que resolvió tras el descanso con un gran tercer cuarto (20-31) y la decisiva actuación de la dupla Llull (17 puntos)-Tavares (12 puntos, 8 rebotes y 23 de valoración).
Los blancos propusieron un ritmo anotador alto de inicio que no rehuyó el Montakit Fuenlabrada. Llull, con 11 puntos, acaparaba el protagonismo en el primer cuarto. Bellas (8) y Nogueira (5) lo hacían para los locales. No fue hasta el minuto 9 cuando el Real Madrid empezó a tomar la iniciativa coincidiendo con su despertar defensivo. Se tradujo en un 12-2 en los siguientes tres minutos para pasar del 21-20 al 23-32, máxima en lo que iba de encuentro.
Mantenerse arriba
No fue sencillo, porque los de Néstor García se cruzaron en el despegue madridista. Su buena reacción con un quinteto bajito, con Popovic y Marc García al frente, puso en apuros al Madrid, que sin Llull encadenó varias pérdidas. Su rival igualó la pelea por el rebote y se creció con el aliento de su afición. 13-4 de parcial y partido empatado a 41 en el 18′. El Real Madrid se apoyó en Reyes (8 puntos sin fallo) y en un triple de Campazzo en los últimos instantes del segundo cuarto para sofocar el intento de remontada local (43-46).
El tercer cuarto marcaría el devenir del partido en favor de los blancos. El equipo cerró la zona, con un contundente Tavares, que ganaba la partida a Nogueira y le mandaba al banquillo con cuatro faltas. Llull seguía siendo el motor con su punto número 17, pero ya con la ayuda en ataque de Randolph, Carroll y el propio Tavares. En el 24′, el Madrid superaba la barrera de los 10 puntos de ventaja, que fue aumentando hasta los 15 del 58-73 en el 30′. Deck, con una jugada recorriéndose toda la cancha que acabó en una bandeja sobre la bocina, culminaba un gran cuarto madridista con 31 puntos.
Intensidad
El Real Madrid no bajó la guardia en el último cuarto. Su rotación mantuvo la intensidad y supo gestionar la ventaja desde la defensa. Ayón y Rudy tomaron el testigo ofensivo para alcanzar la media anotadora de este curso. Una circunstancia insalvable para el Montakit Fuenlabrada, que no dejó de intentarlo. Lo que pasa es que enfrente se encontró al mejor equipo de la Liga a domicilio, que esta temporada no conoce la derrota como visitante en ninguna competición.
Nota de prensa Real Madrid • ACB Photo
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