El triple, ¿un callejón sin salida para el baloncesto?

Podríamos hablar sobre el mundo entero, pero me centro en la NBA, que atraviesa una etapa de transformación que ha convertido al triple en su protagonista indiscutido. Algo que en sus inicios era solo una opción táctica, hoy se ha consolidado como la principal vía ofensiva en muchos equipos. Con conjuntos como los Boston Celtics intentando más de 50 triples por partido, el baloncesto ha dado un giro radical. Este fenómeno ha suscitado una reflexión: ¿se está perdiendo la esencia del juego al anteponer el triple sobre otras estrategias más completas?

La temporada 2024-25 está marcando un antes y un después, con un aumento exponencial en los intentos de triple. Hoy, los equipos intentan más triples que tiros de dos puntos, algo impensable hace solo una década. El equipo más representativo de esta nueva ola es Boston, que intenta un promedio de 51.3 triples por encuentro. Pero no solo ellos. Equipos como Charlotte, Chicago y San Antonio se han subido al carro, buscando imitar el modelo de éxito de los Warriors. Este cambio de enfoque ha abierto un debate interesante: el baloncesto, tradicionalmente más variado, está tomando una dirección que podría limitar sus posibilidades estratégicas.

Esto ha resultado en una caída en la calidad del espectáculo y, por ende, en una disminución de la audiencia. Al parecer, el baloncesto ha dejado de ser un deporte multifacético y se ha convertido en un show centrado solo en el lanzamiento exterior.

Adam Silver, comisionado de la NBA, ha ofrecido una perspectiva diferente, atribuyendo el descenso en la audiencia a factores ajenos al juego, como la competencia con otros eventos deportivos o la política. Pero lo cierto, y más en un mundo tan medido como el de hoy, en lo que audiencias se refiere, las cifras cantan.

Como toda disciplina, el baloncesto se adapta y evoluciona con el paso del tiempo. Desde la introducción del triple en los años 70 hasta el dominio de los pívots en los 90, cada década ha dejado su marca. Sin embargo, el actual énfasis en el triple podría estar acercando el juego a una zona de confort que podría limitar su crecimiento. ¿Seremos capaces de encontrar un equilibrio entre la espectacularidad del triple y la diversidad de estrategias que hicieron grande al baloncesto? La respuesta es incierta, pero lo que está claro es que el futuro de la NBA y del baloncesto entero dependerá de su capacidad para reinventarse.

Foto: espn.com