El Dreamland Gran Canaria consiguió un triunfo de enorme valor en su lucha por los puestos de Playoff al imponerse al Joventut Badalona por 79-68. Una victoria que, sin embargo, no fue suficiente para desbancar a los verdinegros de la sexta posición, ya que el ‘basket-average’ global sigue favoreciendo al conjunto catalán por una diferencia de +49 frente al +19 de los isleños
El protagonismo del partido se repartió entre el pívot estadounidense con pasaporte esloveno Mike Tobey y el argentino Nico Brussino. Tobey dominó en la pintura con 12 puntos, 8 rebotes y 21 de valoración, mientras que Brussino se erigió como el gran catalizador de la victoria local al anotar 16 puntos, todos ellos en un segundo tiempo descomunal que volteó el signo del encuentro. En el lado visitante, la dupla interior formada por Ante Tomic y Artem Pustovyi cumplió con su cuota habitual de protagonismo, firmando entre ambos 23 puntos, 15 rebotes y 32 de valoración, aunque sus esfuerzos no fueron suficientes para frenar el empuje claretiano.
El partido comenzó con un intercambio de golpes en el que Dreamland Gran Canaria tomó la iniciativa gracias al acierto de Shurna y Albicy, firmando un 12-8 en el ecuador del primer cuarto. Sin embargo, el Joventut reaccionó rápidamente de la mano de Ribas y Kraag, que encontraron el aro desde el perímetro para darle la vuelta al marcador (12-14). La respuesta de los locales no tardó en llegar, con Conditt y Homesley asumiendo protagonismo para mantener la igualdad, aunque el técnico visitante, Dani Miret, recurrió a su poderosa pareja interior, Tomic y Pustovyi, para cerrar el primer cuarto con una ligera ventaja (17-18).
El segundo cuarto mantuvo la misma tónica de igualdad. Vives y Dekker aportaron puntos para los verdinegros, mientras que Pelos y Homesley replicaron para los canarios en un intercambio de triples que dejó el marcador en un ajustado 27-28 a falta de cinco minutos para el descanso. En ese tramo, el encuentro se transformó en un correcalles donde las pérdidas y los errores se sucedieron en ambos lados de la cancha, aunque el marcador permaneció prácticamente intacto. Tobey, sólido en la pintura, sostuvo al Dreamland, mientras Tomic se encargaba de mantener a flote al Joventut, llegando al intermedio con un apretado 37-36 para los isleños.
El tercer cuarto fue el escenario del despertar de Nico Brussino. El argentino, que se había marchado al descanso sin anotar, destapó el tarro de las esencias con 12 puntos en apenas tres minutos, liderando un parcial demoledor que estiró la ventaja del Dreamland Gran Canaria hasta el 52-45. El técnico Dani Miret se vio obligado a parar el partido para reorganizar a su equipo, y el ajuste defensivo surtió efecto. Dekker y Ribas recuperaron el protagonismo ofensivo, y el Joventut volvió a apelar a su fortaleza interior con Tomic y Pustovyi para igualar la contienda (58-57) al borde del último cuarto.
En los diez minutos finales, un triple de Grazulis pareció darle alas al Joventut (58-62), pero el Dreamland no bajó los brazos. Tobey y Brussino se combinaron para devolver el mando a los locales (69-64) a falta de menos de cinco minutos para el final. El Joventut entró en un bache ofensivo que los isleños no desaprovecharon, aprovechando el cortocircuito visitante para igualar el ‘basket-average’ particular (76-65). No obstante, Tomic y Hanga lograron reducir la diferencia en las últimas jugadas, cerrando el marcador en 79-68.
A pesar de la derrota, el Joventut logró conservar la sexta plaza gracias a su diferencia de puntos global, un factor que podría resultar crucial de cara al cierre de la fase regular. El Dreamland Gran Canaria, por su parte, se mantiene en la pelea por los Playoff, demostrando que su fortaleza en casa sigue siendo un argumento de peso en la lucha por los puestos de privilegio.
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