Jordi Trias marca territorio en el estreno de la final

Había llegado el Melilla Baloncesto al Nou Congost con un valiente planteamiento pero la presencia de Jordi Trias en la pintura terminó por disolver las opciones de victoria de un plantel visitante que no pudo aguantar la exigencia física de la prórroga. Así, el conjunto de Diego Ocampo explotó al máximo su factor cancha para adelantarse en una serie que vivirá este mismo domingo su segundo asalto

El primer punto de la serie final se encuentra ya en el casillero del ICL Manresa tras un primer asalto en el que los hombres de Diego Ocampo no fallaron ante sus aficionados de la mano de un estelar Jordi Trias. Y es que, el ala-pívot gerundense, ejerció como el principal referente ofensivo de un equipo que mira ya con optimismo al segundo asalto.

ICL Manresa vs Melilla Baloncesto (72-70 / 1-0)

El “factor Trias” decide el primer punto dela lucha por el ascenso

Con un ambiente digno de una final y las gradas ejerciendo como fiel reflejo de lo que había en juego sobre la pista, el ICL Manresa y el Melilla Baloncesto iniciaron una dura batalla en la que no tardaron en despejarse las primeras incógnitas surgidas en las horas previas. De ello se encargaron los de Alejandro Alcoba en un completo inicio de partido en el que los primeros puntos de su línea exterior sirvieron para demostrar que el equipo se encontraba en un buen momento de forma tras la disputa del quinto encuentro en la noche del martes. Con un buen papel de sus exteriores, los visitantes fueron capaces de combatir el serio inicio de un Jordi Trias al que silenciaba Filip Djuran con un certero triple abierto(6-12). Tiraba Diego Ocampo de su primer tiempo muerto de la noche y, a partir de ese momento, su equipo pareció ganar claridad ofensiva para anotar con una mayor fluidez llegando al término del primer cuarto con buenas sensaciones (12-17).

Se había sentido mucho más cómodo el ICL Manresa en los últimos minutos del primer acto y eso se tradujo en una mayor confianza a lo largo de una reanudación en la que un ttriple de Hamilton inquietó sobremanera a un Alejandro Alcoba que tiraba de tiempo muerto y pizarra. Pese a las indicaciones de su técnico, los melillenses siguieron sufriendo el buen momento de un ICL Manresa que aprovechó las pérdidas de balón para estirar su parcial hasta un 11-0 con el que colocarse por delante en el marcador (24-22). A base de rotaciones, los visitantes lograron desatascar su ataque pero el trabajo ofensivo del Melilla Bto no fue suficiente para poder frenar el juego interior de un ICL Manresa en el que Nacho Martín sumaba sus primeros puntos (6) y en el que Jordi Trias (7)comenzaba a hacer de las suyas para alcanzar el descanso con una pequeña renta (37-33).

Fue, tras el paso por vestuarios, cuando el partido entró en una de sus fases más complejas.Con el Melilla Baloncesto completamente atascado en ataque y el ICL Manresa anotando de la mano de Jordi Trias, los manresanos lograron su máxima renta del partido anunciando sus intenciones de romper el choque (44-33). Un complicado momento que los de la Ciudad Autónoma sacaron adelante a través del crecimiento ofensivo de Mamadou Samb desde posiciones cercanas al aro y la media distancia pero, en especial, a través de los puntos de Edu Durán desde el 4,60 y el acierto exterior de un Diego Kapelan imparable a la hora de armar el brazo (51-50).

Con 10 minutos por jugarse y el triunfo aún en el aire, el ICL Manresa comenzó a golpear con fuerza a su rival desde posiciones interiores, un trabajo que el Melilla Baloncesto supo neutralizar desde su acierto exterior con Diego Kapelan “on fire”. Así se llegó al tramo final de un cuarto periodo en el que Mamadou Samb pudo haber sido decisivo con un triple al cuarto intento a falta de 14 segundos(68-70). Quedaba una última jugada y, en ella, Jordi Trias reforzó su condición de héroe con un tiro a falta de 3 segundos con el que apuntar directamente a la prórroga (70-70).

Ya en el tiempo añadido, al Melilla Baloncesto comenzaron a temblarle las piernas pagando el gran esfuerzo del quinto encuentro del pasado martes y de los 40 minutos en los que el ICL Manresa había planteado una exigencia máxima. Así, un primer parcial de 9-3 comenzó a decantar la balanza (79-73). Así, los locales pusieron la directa hacia un triunfo con el que apuntarse el primer punto de la serie final ante un Melilla que se vació sobre la pista (83-76 / 1-0).

La clave: Un martillo pilón llamado Jordi Trias. Con Melilla apretando con fuerza desde el mismísimo salto inicial, Jordi Trias se vistió con el traje de héroe para poder desgastar desde la pintura a un rival que no pudo con sus 32 tantos de valoración en una noche en la que los 45 minutos de juego terminaron por anular a su rival.