La lucha constante de Marek Blazevic tiene recompensa

Marek Blazevic dominó la zona en la victoria contra Surne Bilbao Basket (acb Photo / A. Arrizabalaga)

Marek Blazevic dominó la zona en la victoria contra Surne Bilbao Basket (acb Photo / A. Arrizabalaga)

En Monbus Obradoiro el trabajo siempre trae resultados

La estancia de Marek Blazevic en Monbus Obradoiro no ha sido fácil en ningún momento. El joven pívot lituano no ha tenido regularidad ni en su rendimiento ni en sus minutos en estos dos cursos que ha jugado en Santiago. Las expectativas eran muy altas cuando llegó por su rendimiento en Euroliga y por el rendimiento que el Obra ha sacado a otros interiores jóvenes. La comparación con Laurynas Birutis ha sido un hándicap a la hora de juzgar su rendimiento, olvidándose afición y prensa que Blazevic llegó dos años más joven que el actual jugador del Zalgiris y sin haber tenido nunca tanto protagonismo como tuvo Birutis, que llegaba con un MVP de la liga lituana bajo el brazo.

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Marek Blazevic tuvo un intenso duelo con Juan Fernández en el derbi gallego (acb Photo / A. Baúlde)

Marek Blazevic es un pívot a la vieja usanza. La zona es su hábitat natural y sus principales virtudes son el juego al poste y la batalla por el rebote. La temporada pasada debutó en una liga tan complicada como la ACB donde la bisoñez a la hora de defender a los mejores jugadores del mundo tras los de la Euroliga y la NBA puede penalizar mucho los minutos de juego de los interiores. Blazevic no tiene las virtudes modernas de un tiro fiable y en comparación con otros pívots “old school” de la competición como su compañero Pustovyi, Shermadini o el mencionado Birutis se queda algo corto de altura al no alcanzar los siete pies. Y no tiene el atleticismo de otros jugadores para compensarlo.

Esos son los principales motivos de la falta de constancia en su juego y en su rendimiento en su paso hasta el momento por la ACB. Pero en los últimos partidos de Monbus Obradoiro, los que han llevado a dos victorias que pueden ser clave para la permanencia, Marek Blazevic ha sido un jugador determinante, especialmente en la última victoria en casa de Surne Bilbao Basket. Y el principal motivo de ello es que si hay algo constante en el lituano esto es su lucha en la zona.

La efectividad en la zona como mayor virtud

Hemos comenzado el artículo hablando de los puntos negativos del juego de Marek Blazevic, pero el lituano tiene grandes virtudes que ha explotado especialmente en sus últimos cinco partidos. El natural de Vilnius tiene un gran juego al poste que lo convierte en un seguro de canasta cuando le llega el balón en la zona. Es el quinto en porcentaje de tiros de dos de la ACB con 67’3%. Solo lo superan Matt Costello (68’6%), Ethan Happ (68’8%), Giorgi Shermadini (69’6%) y el inalcanzable Edy Tavares (75’9%). En estas cinco últimas jornadas aún ha sido más efectivo firmando un espectacular 17 de 22 (77’27%).

Otro aspecto que destaca el rendimiento de Marek Blazevic es su productividad por minuto. Al llevar una media de solo 13:49 minutos de juego, sus números no son llamativos, pero si nos vamos a la extrapolación a cuarenta minutos la cosa cambia. El lituano es el tercer máximo anotador por minuto del Obra con 19’6 por cada cuarenta minutos y el segundo máximo reboteador con 9’9. En  el PER, estadística que también tiene en cuenta el tiempo de juego, es el tercero con 20’2, por encima de uno de los jugadores más productivos del equipo como Thomas Scrubb.

Blazevic jugando el uno contra uno al poste contra Willy (acb Photo / A. Baúlde)

Los promedios de Marek Blazevic esta temporada son de 6’8 puntos, 3’6 rebotes y 8’1 de valoración. En los últimos cinco partidos ha tenido medias de 9’8 puntos, 6’4 rebotes y 17 de valoración. Y eso se ha transformado en 2 victorias y 3 derrotas, siendo pieza clave en que el equipo haya competido en todos los partidos hasta el último minuto, exceptuando el horrible último cuarto de Zaragoza. La victoria contra el Barça estuvo a tiro de un serie de tres tiros libres fallados y Blazevic fue de los mejores ese día con 22 de valoración.

Lo que no se ve en las estadísticas

Todo aficionado del Obra adora la valentía y el carácter de Marek Blazevic en una cancha. Dentro de las virtudes que no se ven en las estadísticas hay que hablar de que el lituano le planta cara a cualquiera sin ningún miedo y se crece en la pelea. Volviendo al partido del Barça, Roger Grimau se vio obligado a explotar a Jan Vesely (27:07 minutos) ya que Blazevic, como se suele decir en lenguaje popular, se comió a todo un Willy Hernangómez. El MVP del Eurobasket de 2022 y ex NBA salió con cierta indolencia y el lituano le ganó todas las batallas tanto en defensa como en ataque. Y fue solo un ejemplo más de la batalla constante que juega cada partido Marek en las zonas ACB. Pueden no salirse las cosas, pero pelear, pelea siempre.

Otro aspecto a destacar de Marek Blazevic es que esta temporada ha visto como el cuerpo técnico lo ha tenido que usar como recurso jugando de cuatro al lado de Artem Pustovyi. Sus características le hacen sufrir en muchos aspectos en esta posición, pero Blazevic ha salido airoso en muchos momentos de este año en esas tareas y su juego no se ha resentido teniendo que cambiar de posición de forma constante a lo largo de un mismo partido.

Marek Blazevic compartiendo cancha con Pustovyi (acb Photo / A. Baúlde)

Bilbao Basket es su rival favorito

El mejor partido de Marek Blazevic ha sido en esta última victoria contra el equipo entrenado por Jaume Ponsarnau. El lituano batió su récord personal de rebotes con 11 y empató su mejor valoración con 23 créditos, los mismos que había firmado la temporada pasada en el Fontes do Sar contra el propio Bilbao Basket, partido en el que sumó su mejor anotación ACB con 19. Por su fuera poco, su hito personal en asistencias también lo consiguió en el partido de la primera vuelta de la 22/23 en Bilbao. No cabe duda que los bilbaínos son su rival favorito.