Era un partido a vida o muerte. El que ganara evitaría a España en siguiente ronda. Porzingis y Blums lo tuvieron claro desde el primer momento y se salvaron tras el 89-79 final
Letonia y Turquía salieron con todo. No les quedaba otra. El magnífico premio para el perdedor era enfrentarse contra nada más y nada menos, España. Un último esfuerzo para evitar al hueso no estaba de más.
Los esfuerzos de Mahmutoglu, muy acertado con 11 puntos en el primer cuarto, fueron bien contrarrestados por el juego en equipo rival, siendo Porzingis, con siete tantos, y los cinco que consiguieron entre Bertans y Timma, los mejores para dejar el 24-22 al término del periodo inicial.
En el segundo cuarto, Letonia se lo tomó aún más en serio, y a la aportación de los anteriores se unió un Janis Blums para ampliar el resultado. El tirador turco siguió a lo suyo y le ayudó Osman y Guler, aunque no fue suficiente para evitar el 47-38.
Tras la reanudación, los otomanos lo intentaron y se llegaron a una distancia que llenó el pabellón de fe, pero Letonia tenía muy claro que si seguían por ese camino se evitarían muchos problemas. Porzingis y Blums se encargaron del asunto y llegaron a los últimos diez minutos con el 69-63, gracias a un tres más uno de Osman y a un dos más uno final de Erden.
Esas dos jugadas motivaron a los turcos, que se acercaron con la ayuda del público. Los letones no encontraban soluciones hasta que Dairis Bertans, con un triple, les hizo respirar. Después, tranquilidad. Serán los turcos los que se enfrenten a España tras el 89-79.
Nota de prensa ACB • Foto: FIBA
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