La Selección U18 Femenina subió al segundo escalón de pódium al perder la final ante Francia, de forma cruel, tras firmar un campeonato extraordinario. Las lágrimas de nuestras jugadoras, desgastadas por el esfuerzo realizado, se convertirán en orgullo por el gran trabajo realizado durante todo el Europeo
Orgullo de volver a situar una selección española en una final, de volver a competir por lo máximo, hasta el último partido de la competición. En lo que llevamos de verano hemos vivido oro en las selecciones U20 en una excelencia de resultados convertida en normalidad desde hace muchos veranos y que hace que algo excepcional como es ser números uno se convierta en habitual. Detrás de esos éxitos, decenas de entrenadores y entrenadoras que desde los clubes y Federaciones Autonómicas han descubierto, impulsado, formado los nuevos y emergentes talentos que cada año fluyen desde la base de nuestro deporte. Los técnicos y las compañeras y rivales de esas doce elegidas de cada generación también forman parte del éxito.
Fue una final atípica, con el partido interrumpido muchos minutos en los primeros minutos a casusa de las goteras provocadas por la tremenda tormenta que afectaba al centro de Europa. Un mal inicio 12-4, un rival potente como Francia que impuso su fuerza en el primer cuarto con un parcial final de 19-9 y que condicionó el desarrollo del partido porque si España se había impuesto por intensidad y agresividad en todos los partidos anteriores, esas virtudes también las poseen las atléticas jugadoras francesas que colapsaron el ataque español en la primera parte, afectado también por la inoportuna lesión temporal de la mejor de nuestras anotadoras, Ginzo, en los últimos minutos del segundo cuarto. La ventaja gala al descanso era de 13 puntos (32-19). Los bajos porcentajes en triples, 1 de 8, y el dominio francés bajo los aros condicionaba el rendimiento.
Tras el descanso la ambición de nuestra selección le llevó a pelear el partido, incluso reducir diferencias siete puntos gracias a un tremendo esfuerzo defensivo a toda pista, como siempre en el campeonato pero ahora ya con el hambre y ansiedad que genera el saber que no había un mañana. España lo se dejaba nada en la pista, lo entregaba todo y más, de las que pepeaban por remontar y de las que desde el banquillo animaban sin descanso. Pero aunque reducida en dos puntos la diferencia gala seguía siendo amplia al final del tercer cuarto (45-34).
Remar contracorriente tras un campeonato durísimo y ante un rival de la fortaleza física y el talento de Francia tenía que acabar pasando factura. 52-34 en el minuto 32, un mazazo ya de muy difícil recuperación, física y anímica. Con la moral alta y el viento a favor Francia anotaba desde la línea de tres convirtiendo cada triple en un golpe más a la moral española. La resistencia de nuestras jugadoras fue cediendo por el desgaste acumulado y el resultado final acabó siendo exagerado aunque sí confirmó el gran nivel de la campeona Francia.
Nota de prensa FEB
CEO de Piratas del Basket
twitter personal: @raainaga
twitter web: @piratasbasket
mail: redaccion@piratasdelbasket.net