El partido comenzó con Sergio de Larrea dando un recital en la dirección del juego que, junto al buen hacer de Jaime Pradilla y Matt Costello, dando pie a un parcial inicial de 8-0, con Juani Marcos y Amidah Brimah haciendo acto de presencia tras la batería de cambios en ambos conjuntos para mantener la dinámica
Ike Iroegbu y William Howard trataron de igualar la situación, con Aljami Durham sumándose la causa, dando pie a un cambio total de la situación, parcial 0-10 mediante, dejaron un marcador de 21-22 al final del primer cuarto.
Al inicio del segundo cuarto, tanto Howard como Juan Fernández o Nike Sibande mantuvieron la igualdad pese a que Jean Montero, Josep Puerto y de Larrea siempre metían, junto con Brancou Badio, Chris Jones y Nate Sestina, trataban de mantener las exigencias del conjunto catalán, con Iroegbu y Costello (con triple sobre la bocina) para dejar un marcador de 44-45 al descanso.
Tras la reanudación, la igualdad fue máxima en ambos lados de la pista, con Semi Ojeleye y Sergio de Larrea yendo al rescate pero Ike Iroegbu y Juani Marcos manteniendo la situación para el conjunto que dirige Fotis Katsikaris, que no pudo frenar la intensidad creciente del conjunto taronja, dejando un marcador de 70-60 al final del tercer cuarto.
Al inicio del último cuarto, y con la merecida ovación que recibió Guillem Ferrando al salir a pista, el conjunto local dominaba con Costello, Jaime Pradilla y Ojeleye, junto con Brancou Badio y Chris Jones, tratando de superar los esfuerzos de James Nnaji o Sergi Martínez, que daban pie a un marcador de 85-71 a falta de menos de cinco minutos para terminar el encuentro.
Finalmente, y pese a los impedimentos, Valencia Basket sumó una victoria de valor por 98-78 frente a un Básquet Girona que ya provocó pitos la temporada pasada, pero con un broche dorado a base de una selección de pases finalizada con triples, ya signo de identidad del equipo entrenado por Pedro Martínez, como ya ocurrió en su primera etapa en el club.
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