[2-0] El Baskonia solo cedió en el último segundo (84-82)

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Faltó poco, muy poco, pero el conjunto vitoriano se quedó a las puertas de remontar y robar el factor cancha a los moscovitas. Beaubois lideró a los vascos, Hines y Teodosic, los mejores por parte local

Ambos equipos aspiran a estar en la Final Four. Sin embargo, los pupilos de Dimitrios Itoudis son los favoritos, y eso lo tenían que demostrar. Pero los primeros compases estuvieron marcados por la igualdad y, sobre todo, la intensidad de los dos conjuntos. Y hablando de intensidad, quién mejor que Kyle Hines, que acompañó perfectamente al poderío anotador de Nando De Colo.

Al filo del final del primer cuarto, los rusos tuvieron opción para escaparse mínimamente. No obstante, el Baskonia se rehízo y un triple de Kim Tillie, casi sobre la bocina, dejó un apretado 21-20 al término de los diez minutos iniciales.

Con el segundo periodo en marcha, Rodrigue Beaubois hizo su carta de presentación con dos triples para poner en jaque al CSKA. Pero la alegría duro poco, puesto que tras un tiempo muerto encajaron un parcial de 11-0 liderado por Vitaly Fridzon. Los de Sito Alonso se habían vuelto a atascar y cedieron la ventaja lograda poco antes de llegar al descanso (40-35).

Los vascos tenían una oportunidad, pero tenían que dejar atrás los constantes altibajos que tanto les estaban lastrando. Iban y volvían del partido con demasiada facilidad, algo que no dudó en aprovechar Milos Teodosic tras la reanudación.

El veterano y talentoso base serbio entró en calor y no encontró más respuesta que alguna canasta de Beaubois. Los de Moscú se escapaban por encima de los diez tantos a la vez que ahogaban a Baskonia. Ni Shane Larkin ni Adam Hanga estaban apareciendo y eso, como no, lo estaban pagando igual o más caro que las numerosas pérdidas de balón.

Ni siquiera la incursión de Jaka Blazic, hasta entonces marginado en la serie, funcionaba para mejorar el nivel defensivo. Todo era un desastre y el partido se rompía en favor de los rusos, que se plantaron en el último cuarto con una ventaja (69-58) que pudo ser mucho más contundente.

Una vez en los minutos decisivos, el Baskonia amagó con una reacción liderada por Laprovittola en un quinteto muy físico. Sin embargo, el posterior susto de Hanga torciéndose el tobillo y la mejoría atrás del CSKA terminaron por devolver las diferencias de dobles dígitos cuando restaban cuatro minutos.

Todavía había posibilidades, y más con De Colo cometiendo su quinta falta personal sobre Shane Larkin, que convertía un 2+1 para dejar el 77-73 a falta de dos minutos. Pero por ahí estaba Kyle Hines para hacer lo mismo en el siguiente ataque, un intento de daga que encontró respuesta en seis puntos consecutivos de Budinger y Voigtmann (80-79).

Restaban 37’2 segundos y todo estaba por decidir. Pero Aaron Jackson encestó una bandeja con 14’4 segundos por disputarse, tiempo que apenas se movió hasta el triple de Beaubois (82-82). Sin embargo, en la posterior jugada y tras errar Teodosic, Hines fue objeto de falta tras capturar el rebote ofensivo.

El pívot norteamericano no falló ninguno de los tiros libres y, con solo 1’1 segundos y sin tiempos muertos, el Baskonia no encontró aro en un tiro a la desesperada. De esta manera, los rusos se hicieron con el segundo tanto de la eliminatoria y dejan al borde del precipicio a uno de los dos representantes ACB.

CSKA Moscú – 84 (21+19+29+15): Jackson (7), De Colo (10), Kurbanov (8), Vorontsevich (2), Hines (10) – cinco inicial – Teodosic (16), Augustine (9), Fridzon (8), Antonov (-), Freeland (-), Higgins (8), Khryapa (6).

Saski Baskonia – 82 (20+15+23+24): Larkin (8), Hanga (6), Budinger (12), Shengelia (3), Voigtmann (10) – cinco inicial – Sedekerskis (-), Beaubois (21), Blazic (2), Diop (7), Tillie (10), Laprovittola (3), Luz (0).

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