Bélgica supera a Bielorrusia para quedar tercera

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Bélgica se repuso de su dolorosa derrota de semifinales ante Serbia para apropiarse de la medalla de bronce en el EuroBasket FIBA Femenino gracias a su éxito por 77-69 ante Bielorrusia

La victoria asegurada por Bélgica igualó su mejor posición final, obtenida en 2017. Bielorrusia tuvo que confirmarse con su segunda mejor posición en el torneo, tras haber acabado cuarta en 2015 y tercera en 2007.

Punto de inflexión: Con el partido empatado a mitad del primer cuarto, Bélgica endosó un parcial de 15-3 y la ventaja de doble dígito cosechada desde entonces empujó a Bielorrusia a ir siempre a remolque. Fue, a la postre, la base para la victoria, ya que fue incapaz de recuperar esa diferencia a lo largo del partido.

Heroínas del partido: Emma Meesseman estuvo impresionante y guió a su equipo a la última plaza del podio con 21 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias. Por su parte, Antonia Delaere tuvo una noche soberbia en el tiro, con 17 puntos y 8 de 9 en el lanzamiento para superar su mejor marca de anotación en el torneo.

Estadísticas incontestables: Bielorrusia abusó demasiado del lanzamiento lejano y se fue a un 5 de 25, lo que deja la duda de lo que pudiera haber pasado de haber sido capaces de proveer a sus jugadoras interiores algo más durante el partido.

Letra pequeña: Bélgica tuvo que recuperarse mentalmente de la desilusión de perder la semifinal en el último segundo ante Serbia. Salió como un equipo herido y preparado desde el primer segundo. Pese a la decepción de perderse la final, puede estar satisfecha de entrar en el podio, especialmente teniendo en cuenta cómo comenzó el torneo, con una inesperada derrota ante Bosnia Herzegovina. Bielorrusia impactó muy por encima de sus posiblidades y estará encantada de entrar entre las cuatro mejores de la competición. Se apoyó sobre manera en su trío principal de Anastasyia Verameyenka, Maryia Papova y Alexandria Bentley, quienes merecen total reconocimiento.

Lo que dijeron: “Tuvimos la ambición para jugar la final, pero no llegamos. Sin embargo, debemos felicitar al equipo por el esfuerzo realizado y la recuperación mental que hemos hecho tras la derrota en la semifinal contra Serbia. Mostramos mucha madurez. La medalla de bronce que conseguimos en 2017 fue una sorpresa y obtenerla ahora no es el mismo sentimiento. La gente quiere y nos empuja por más. Está bien que tengamos ambición. Pero incluso equipos grandes como Italia y España no están ni siquiera entre las seis mejores, así que estamos orgullosas.” Philip Mestdagh, entrenador de Bélgica.