Hoy en día el mejor baloncesto de Europa se ve en el Palau Blaugrana. Esta la tarde los de Saras destaparon el tarro de las esencias y pasaron por encima de Gran Canaria que nada pudo hacer para evitar el triunfo local por 98 a 80. Tras esta victoria los azulgranas son más líderes con un balance de 19 triunfos y 4 derrotas. Por su parte el equipo dirigido por Porfirio Fisac queda fuera de los puestos de playoffs con récord negativo (11-12). Los visitantes no dieron una buena imagen y no aguantaron ni un cuarto entero, ante este Barça al que es difícil verle las costuras
Inicio fulgurante de partido de ambos conjuntos en lo que pareció ser más un uno contra uno, que un encuentro de cinco contra cinco. En los primeros tres minutos y medio tan sólo anotaron dos jugadores, Rolands Smits (9 puntos) para los locales y Artem Pustoyvi (6 puntos) para los visitantes. Sus compañeros los buscaban en cada situación y tanto uno como otro dispusieron de más ocasiones para ampliar su estadística particular. Se llegaba en un abrir y cerrar de ojos al ecuador del primer cuarto con las primeras ventajas para los azulgranas (11-6).
Poco a poco los de Saras fueron entrando en el partido y en este preciso instante Nikola Mirotic entró en combustión. Tres triples consecutivos suyos dieron la máxima ventaja a los blaugranas (24-10 minuto 8), ante la atónita mirada de Fisac. El entrenador visitante veía impotente como el partido se les podía escapar en estos primeros compases. Una canasta sobre la bocina de Brandon Davies certificaba el 28 a 16, con el que se llegaría al final del primer acto.
Mirotic había abierto la caja de Pandora y el vendaval azulgrana estaba desatado. Gran Canaria no anotaba y además era incapaz de cortar el acierto en el perímetro de los de Saras (8/14 desde la línea de tres). Tras un triple de Hayes, la ventaja se fue a los veinte puntos (36-16 minuto 12).
Este segundo cuarto fue para Álex Abrines. El alero español mostró sus mejores minutos desde que volvió de su lesión y con nueve puntos consecutivos sin fallo, dejaba el partido prácticamente sentenciado (48-18 minuto 15).
Artem Pustoyvi en su vuelta al Palau, era el único que mostraba un poco de carácter por parte canaria. Sus diez puntos eran lo poco positivo que reseñar de un Gran Canaria totalmente superado. Con esta tesitura se llegaba al final del primer período con un resultado que lo resume todo, 61 a 28. Partido totalmente sentenciado para los de Saras, que ya podía ir pensando en rotar, cara a futuros encuentros.
La vuelta de vestuarios sirvió para seguir viendo la mejoría de Abrines. Su 5 de 5 desde la línea de tres, para un total de 17 puntos en once minutos disputados así lo atestiguaban. El partido mostraba un demoledor 69 a 30 (minuto 23) y ahí Saras comenzó a dar minutos a hombres menos importantes de su rotación.
Gran Canaria con todo perdido, comenzó a jugar mejor y elevó su nivel de acierto. Esto, unido a una relajación por parte blaugrana, provocó que los canarios acortaran las diferencias, tras un parcial de 11 a 25. De todos modos, se llegaba a los diez últimos minutos con todo decidido (80-55).
En el arranque del último período los amarillos continuaron rebajando la diferencia ante un Barça que había bajado demasiado de revoluciones. Ante este aumento de prestaciones, los visitantes consiguieron bajar la barrera de los veinte puntos (82-65 minuto 33), intentando maquillar el resultado. Sin embargo, Saras pidió tiempo muerto para arengar a sus jugadores y la ventaja volvió a crecer, llegando al final del encuentro con el resultado de 98 a 80.
Magnífico encuentro de los de Saras con sus bases repartiendo gran cantidad de asistencias (Calathes 7 y Jokubaitis 6) y donde los culés mostraron también un fantástico acierto desde los lanzamientos de dos (25/34 para un 74%).
Redactor · Opinión · NBA · Liga Femenina
Twitter: @jmsantiago33