El conjunto azulgrana estará en la Final Four. El Barça estará en Belgrado. Victoria por 81 a 72 ante un Bayern que realizó un gran encuentro y puso en muchos aprietos al conjunto dirigido por Jasikevicius. Un magnífico tercer cuarto de los locales, liderados por un soberbio Nicolás Lapprovittola (26 puntos), fue el punto de inflexión de un partido, que, hasta entonces tenía muy bien controlado Andrea Trinchieri. El equipo germano hizo sufrir de lo lindo al conjunto culé que, pese a la derrota, dio una magnifica impresión. Espera el Madrid, abróchense los cinturones
La puesta en escena del conjunto azulgrana fue muy buena. Espoleado por una afición que debía ser el sexto hombre, los locales tomaban las primeras ventajas (7-2 minuto 3). El Palau rugía como nunca.
Lejos de ponerse nerviosos, el Bayern de la mano de Jaramaz (con cinco puntos consecutivos), dio, en un abrir y cerrar de ojos, la vuelta al marcador (9-11 minuto 6). Los hombres de Trinchieri habían sabido parar el primer golpe.
El guion no era el esperado para los de Saras, que comenzaron a tener problemas en la pintura. Othello Hunter (6 puntos) aumentaba la diferencia germana (9-15 minuto 7). El técnico lituano se veía obligado a parar el partido.
La llamada al orden de Jasikevicius provocó una reacción en sus hombres. Los blaugranas subieron su nivel defensivo y comenzaron a anotar con más facilidad. Fruto de ello, el Barça llegó con una ligera desventaja al final del primer cuarto (18-19).
Al comienzo del segundo periodo, los dos equipos notaron la importancia del encuentro. Los errores se sucedían, pero tras encestar un triple Nicolás Lapprovittola, el Barça volvió a ponerse por delante (24-23 minuto 13).
Anotar se estaba convirtiendo en misión imposible. Con ambas pinturas colapsadas, los errores en los lanzamientos de tres se convertían en la tónica del partido. En la recta final de este segundo acto, el conjunto germano de la mano de Nick Weiler-Babb (9 puntos) y Jaramaz (10 puntos), se reactivó y llegó al descanso dominando el partido (31-37).
El Bayern estaba realizando un señor partido. Los de Múnich, conseguían por el momento, anular la ofensiva blaugrana. Los de Saras eran incapaces de romper la telaraña creada por Trinchieri y, o mucho mejoraban tras salir de vestuarios o no habría billete para Belgrado.
El parón le vino muy bien al Barça, que salió con otra cara, con una versión mucho más mejorada. De la mano de Nikola Mirotic (con 4 puntos consecutivos), los azulgranas le dieron la vuelta al marcador (38-37 minuto 22). El parcial de siete a cero obligó a pedir tiempo muerto al técnico visitante.
Se llegaba al ecuador del tercer cuarto y el Barça ya había anotado más puntos que en todo el segundo periodo, pero el Bayern, con varios triples inverosímiles, se mantenía dentro del partido (45-45 minuto 25).
Un tres más uno de Lapprovittola, fue toda una liberación para los suyos. Los diecisiete puntos del argentino daban la máxima ventaja para un Barça, que también apretaba y mucho, en defensa (56-48 minuto 28). El de Morón estaba desatado. Se había echado al equipo a sus espaldas, en el peor momento de la temporada.
Dos tiros libres del omnipresente Lapprovittola dejaron el 60 a 52 con el que se llegó al final de este tercer cuarto, en el que los de Saras habían sabido revertir la situación.
Si durante la serie el acierto exterior blaugrana había decaído, al arrancar este último acto, el Barça recuperó la efectividad que le caracteriza (11 de 22 para un 50%). Sendos triples de Calathes y Mirotic pusieron tierra de por medio (70-57 minuto 35).
El Bayern insistía en seguir dentro del partido, pero los azulgranas ya liberados de la presión jugaban con fluidez y manejaban el tempo del encuentro (76-67 minuto 38).
Para acabar la fiesta en el Palau, otro triple de Lapro (5 de 7 para el argentino), certificaron el pase del Barça para la Final Four de Belgrado, en la que espera el Real Madrid. El resultado final (81-72).
Foto: euroleague media
Redactor · Opinión · NBA · Liga Femenina
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