El vigente campeón contra un aspirante especial. El equipo que ha dominado los últimos años la competición contra el equipo que más EuroLeague ha ganado. La máxima competición continental busca a su campeón este próximo sábado en Belgrado
El Real Madrid ha sido algo bipolar esta temporada. Para empezar, realizó durante gran parte de la temporada un gran baloncesto, peleando durante muchas jornadas por el liderato, para después entrar en una espiral malos resultados que le hizo descender posiciones en la tabla, al final, (18-10) y 4º clasificados.
En cambio, en los playoffs volvieron a su mejor versión para eliminar de forma contundente a un gallito de la competición, el Maccabi, por (3-0) y diferencias destacables tanto en la pista como en el resultado.
En semifinales superaron al Barcelona contra pronóstico de muchos, por (83-86). En un partido donde el Real Madrid dominó a partir del tercer cuarto gracias a su rebote y a jugar sus bazas hasta el final. Dejaron jugar a Mirotic, que se fue hasta los 26 puntos, 12 rebotes y 5 asistencias, para centrarse más en el resto. En ataque, Causeur 18 puntos, Yabusele 18 puntos y 8 rebotes, y Llull 15 puntos, como más destacados.
Laso no juega con un cinco titular fijo, moviéndolo en virtud al rival que se presente. El más utilizado a lo largo de la temporada y contando la situación extradeportiva de Thomas Heurtel y Trey Thompkins, lo ha formado con Alberto Abalde, 6.1 puntos y 3.0 rebotes, Fabien Causeur, 8.3 puntos y 1.6 rebotes, Adam Hanga, 5.9 puntos y 3.1 rebotes, importante desde su polivalencia, Guerschon Yabusele, 11.9 puntos y 4.7 rebotes como jugador referencia y Walter Tavares, 10.9 puntos y 7.6 rebotes, como el más valorado del equipo.
Saliendo desde el banco los blancos ofrecen alternativas muy sólidas, con jugadores de la casa que llevan muchos años en el club como Sergi Llull, 8.6 puntos y 2.7 asistencias, Rudy Fernández, 6.2 puntos y 3.1 rebotes, capaces de ser importantes en momentos clave, Jeffery Taylor, 3.4 puntos y 1.2 rebotes, siempre destacable desde su defensa, Trey Thompkins, 5.7 puntos y 2.2 rebotes, y Anthony Randolph, 3.5 puntos y 2.2 rebotes, muy lejos del nivel de juego que exhibía antes de su lesión. Una rotación a la que hay que sumar la vuelta de Gabriel Deck, 10.3 puntos y 4.8 rebotes, titular desde su llegada de la NBA, Vincent Poirier, 7.5 puntos y 5.5 rebotes, fundamental en su labor cerca del aro, y Nigel Williams-Goss, 6.0 puntos y 2.4 asistencias, que puede ser duda en la final tras lesionarse ante el Barcelona en semifinales.
El Anadolu Efes no ha realizado una temporada brillante, terminando 6º con un discreto bagaje de (16-12). Pero es un vigente campeón que no ha cambiado prácticamente su plantilla, en algún momento sus estrellas pueden demostrar lo que valen, y los de Ataman lo pusieron en práctica en los playoffs, y fueron los que decantaron la semifinal ante el Olympiacos.
En el playoff eliminaron, con factor cancha en contra, al Armani Milán. Los italianos que terminaron terceros en la regular pagaron caro el hecho de que un equipo del calibre del de Ataman no hiciera los deberes cuando le tocaba. Pero si lo hicieron cuando hacía falta, suficiente para volver a estar presente en una final four y dispuestos a renovar su condición de vigente campeón.
Para ello tuvieron que vencer a un correoso Olympiacos en un partido para la historia que se decidió con un triple sobre la bocina de Micic (74-77). Los turcos supieron mediar con la intensidad de los griegos, destacando en el plano individual Larkin, con 21 puntos, Micic 15 y triple ganador, además de 9 asistencias y 6 rebotes, Bryant, 16 puntos, formando un gran trio exterior, y Dunston, 12 puntos, impecable dentro.
El Anadolu no guarda fidelidad a un mismo cinco titular, pero basándonos en el más utilizado, lo formarán con dos mega estrellas en el base, Vasilije Micic, 18.2 puntos y 4.6 asistencias, y Shane Larkin, 14.6 puntos y 5.3 asistencias. Cuando estos dos jugadores están a su mejor nivel el Anadolu Efes tiene muchos visos de ganar. Beaubois, 9.7 puntos y 2.1 rebotes, completa un tridente exterior muy amenazante. Por dentro Adrien Moerman, 8.8 puntos y 5.3 rebotes, y Tibor Pleiss, 9.4 puntos y 4.2 rebotes, completan un juego interior con mucha experiencia en la competición, y un quinteto que sabe lo que es ganar una EuroLeague hace menos de un año.
En el banco la experiencia no decae, con todo un campeón de la NBA como Elijah Bryant, 5.1 puntos y 2.7 rebotes, Krunoslav Simon que no jugó en las semifinales por molestias, 6.9 puntos y 2.8 rebotes, James Anderson, 3.3 puntos y 2.8 rebotes, Chris Singleton, 3.9 puntos y 2.6 rebotes, y Bryant Dunston, 7.1 puntos y 3.3 rebotes. Todos ellos excelentes jugadores que completan una rotación muy sólida, aspirante a volver a ganar el campeonato.
Las referencias este año entre turco y madrileños es de empate, con ambos equipos haciendo valer su condición de local con victoria. En la ida, el Madrid ganó de forma clara, por (82-69), en un partido que los blancos dominaron merced a un gran primer cuarto, con parcial de (32-15). Heurtel y Yabusele, ambos con 15 puntos, y Tavares, 13 puntos y 12 rebotes, dominando la pintura, fueron los mejores por parte local. En el Efes, Larkin, 21 puntos y 6 asistencias, fue el mejor, Micic no tuvo su tarde con 9 tantos, y un jugador que ahora no cuenta mucho para Ataman, Petrusev, destacó con 17 puntos.
En la vuelta el Anadolu venció por un más ajustado (93-90). Fue un encuentro con ventajas siempre cortas, con el Real Madrid por delante en el marcador hasta el inicio del último cuarto, pero al final se diluyó ante un Efes más entonado en las últimas jugadas. Esta vez Micic fue el hombre con sus 29 puntos y 6 asistencias, los de Laso no pudieron contener su caudal de juego, con Moerman, 18 puntos y 6 rebotes, y Pleiss, 11 puntos, sumando por dentro, para mitigar el mal día en el tiro de Larkin, 12 puntos con 4/15 en lanzamiento. El juego del Madrid pivotó en Deck, 23 puntos, 10 rebotes y 4 asistencias, y Yabusele, 20 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias, sin olvidarnos de un efectivo Hanga, 14 puntos.
¿Quién ganará? Imposible predecirlo. Es una final y puede ganar cualquiera. El Madrid tendrá que estar muy preciso en la defensa sobre Micic, si el serbio juega bien el Anadolu suele ganar, y Larkin, sus dos amenazas más notables, y Ataman tiene claro que tiene igualar el poderío físico de Deck, Yabusele, Tavares, Poirier, … aunque los blancos de nuevo tendrán que lidiar ante el hecho estar en manos del juego de sus bases, a ver qué final realiza Llull, y de su falta por veces, de tiro exterior. Taylor y Hanga pueden ser el factor X de la final con sus defensas sobre las estrellas rivales.
El Anadolu va a jugar su tercera final consecutiva, y en las últimas seis finales ha jugado un representante turco, y el Madrid vuelve a una final cuatro años después, la última que jugó fue aquí mismo, en el Stark Arena de Belgrado, y sí, salió campeón.
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