El Real Madrid gana en la cancha del Darussafaka y se acerca al liderato (82-86)

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Los blancos suman su 17ª victoria en la Euroliga con seis jugadores en dobles dígitos de valoración

El Real Madrid vuelve a colocarse a una victoria del liderato de la Euroliga tras imponerse a domicilio al Darussafaka y aprovechar el tropiezo del Fenerbahçe en Múnich. Los blancos, que firmaron una gran primera parte con 53 puntos y 15 arriba, no se dejaron sorprender por un rival que llegó a empatarles a falta de 38 segundos, tiempo en el que mostró mucha templanza y sangre fría. Randolph, con 15 puntos y 16 de valoración, comandó la ofensiva blanca. Thompkins (15 y 13), Deck (6 y 13), Ayón (5 y 12), Prepelic (10 y 11) y Carroll (12 y 10), por encima también de la decena de valoración. Solventada la primera de tres salidas consecutivas, los de Laso viajan directamente a Málaga para una nueva jornada de Liga el domingo.

Partido de un nivel físico altísimo desde su inicio el que planteó el Darussafaka. Se adaptó bien el Real Madrid y pronto tomó la iniciativa bajo la dirección de Campazzo (5 puntos) y la efectividad de Randolph (9 puntos) para alcanzar hasta nueve puntos de ventaja (10-19, min. 8). Peiners (7) tiró de los locales en un primer cuarto en el que destacó también el gran trabajo de Deck en el rebote, con cuatro, tres de ellos ofensivos (16-23, min. 10).

Exhibición blanca en ataque
El Real Madrid jugó con cabeza y ante el escaso acierto exterior de los otomanos cerró su defensa y el rebote. En ataque impuso un ritmo anotador brutal, con recital de Prepelic y Thompkins, el primero con 10 puntos y el segundo con 13. Imposible de seguir para un Darussafaka desactivado por completo que vivía solo de los destellos de Douglas (15) y Evans. Los de Laso acabaron con 30 puntos el segundo cuarto y la máxima de +15 (38-53) tras triple del ala-pívot norteamericano.

La solidez madridista impedía la reacción de un Darussafaka que lo intentaba ahora con algo más de acierto en el perímetro. Sin embargo, los blancos estaban cómodos con la renta, siempre por encima de la decena, y a pesar de no anotar ningún triple en el tercer cuarto mantuvo el control del partido. Carroll, con nueve puntos, contrarrestó el acierto de Evans, mientras que Randolph puso el espectáculo con un mate tremendo a una mano (59-72, min. 30).

Reacción a tiempo
Pero la dinámica del partido había cambiado. Darussafaka sumó el triple a su ataque y fue creciendo hasta igualar el choque a 82 a falta de 38 segundos. Douglas, su mejor hombre hoy, fue el encargado de poner el empate con un triple que culminaba un 23-10 de parcial a su favor. Sin la inspiración en ataque de la primera mitad y con toda la presión, el campeón de Europa sacó su ADN ganador y no se dejó avasallar. Tavares cogió un rebote en ataque providencial que acabó con él en la línea de personal. En el siguiente ataque turco, con 82-84, Randolph puso un tapón definitivo a Douglas. Campazzo sentenció desde el tiro libre una victoria en la que todos arrimaron el hombro en los momentos decisivos (82-86, min. 40). Un poco más cerca de asegurarse el playoff.

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