Un estratosférico triple de Xabi Oroz y un sólido Real Betis fuerzan los quintos en sus series

Cerró el lado bajo del cuadro sus dos eliminatorias por la vía rápida (3-0) pero ahora habrá que esperar hasta el próximo domingo para cocer el cruce de semifinales resultante de la parte alta. Porque tanto el Guuk Gipuzkoa como el Real Betis fueron capaces de vencer en sus pistas para forzar los quintos de sus series ante Grupo Ureta Tizona y Movistar Estudiantes.

Se intuía un partido igualado en San Sebastián a tenor de lo que habíamos visto sobre la pista en los tres encuentros anteriores y… ¡Así fue! Porque siendo conscientes de encontrarse en un punto de no retorno, los jugadores de Mikel Odriozola supieron sacar tajada de su juego colectivo durante el primer cuarto para comenzar a enseñar sus garras. De nuevo con la dupla Barcello – Aurrecoechea haciendo daño a su rival, pero en esta ocasión con más actores invitados como un Savkov que se gustaba sobre la pista o un Xabi Oroz que pedía paso desde el perímetro. Y aunque no vivió su mejor noche desde el triple durante el choque (0/4) al igual que un errático Grupo Ureta Tizona (6/21), el exterior vasco iba a terminar siendo la llave para poder forzar el quinto. Porque, con el marcador igualado, Grupo Ureta Tizona tuvo hasta dos lanzamientos para ganar el partido y poder hacerse con el billete a la Final Four, hasta que un rebote donostiarra le dio a Oroz la posibilidad de jugarse el triple de 10 metros con le dio la victoria a su equipo (VER VÍDEO). Una canasta que otorga así una vida extra a los donostiarras para poder forzar el quinto en la noche del próximo domingo (82-79).

Y no iba a tardar en llegar el quinto encuentro de la serie también en la otra eliminatoria en juego. Un partido que convirtió el Palacio de los Deportes de San Pablo en toda una fiesta tras 40 minutos de juego bajo un guion similar al del partido del pasado viernes. Porque el conjunto sevillano volvió a llevar la iniciativa desde el inicio, tomando muy pronto rentas de 10 puntos a su favor y teniendo en esta ocasión a Eddy Polanco como punta de laza. Un choque que se complicó un poco más para los madrileños tras el paso por vestuarios con un conjunto local que supo aprovechar sus errores aumentando así las diferencias y complicando el tramo final de partido a un rival sin ideas. Los locales levantaban así el 2-0 inicial en su contra, igualando la serie y forzando el quinto para la próxima semana (77-65).