Brasil ha mostrado dos caras en el Torneo de Clasificación Olímpica FIBA 2024 en Riga, y ambas se vieron nuevamente en las semifinales, ganando 71-60 contra Filipinas
No estuvieron en su mejor forma durante los primeros veinte minutos del partido, pero en la segunda mitad fueron prácticamente imparables.
Después de luchar durante gran parte de la primera mitad, y llegar a estar 12 puntos abajo (24-12) al inicio del segundo cuarto, Brasil encontró el impulso necesario justo antes del descanso.
Con menos de treinta segundos en el reloj de tiro, Didi Louzada rompió la defensa y atacó la canasta con facilidad. Esto anticipó una racha contundente de 13-0 en el tercer cuarto por parte del equipo brasileño, que rompió la resistencia de Gilas y les llevó a la victoria.
El desempeño de 25 puntos de Bruno Caboclo en la victoria inicial contra Montenegro lo convirtió en el primer Jugador TCL del Partido del Torneo de Clasificación Olímpica FIBA en Riga.
Después de perderse el partido contra Camerún, regresó más fuerte que nunca en las semifinales, mostrando gran química en el pick-and-roll y energía en la defensa.
Terminó con su primer doble-doble, acumulando 15 puntos y 11 rebotes. El alero también logró 3 bloqueos, contribuyendo significativamente a cerrar las esperanzas del equipo contrario.
Para reducir las posibilidades de Filipinas de llegar a la final el domingo en la Arena Riga, Brasil necesitaba limitar los intentos de tres puntos de Tim Cone.
Filipinas llegó a las semifinales con un 51.2% de efectividad en 21.5 intentos por juego desde más allá del arco. Esta vez, solo convirtieron 7 de 18, un respetable pero normal 39.0%.
En la victoria de Brasil, la contribución anotadora de los suplentes también fue crucial, superando al equipo asiático en puntos desde el banquillo por 21-11.
Brasil comenzó nuevamente el juego de manera lenta, como en los partidos contra Montenegro y Camerún. Pero, al igual que en sus dos primeros encuentros, salieron del vestuario en el medio tiempo como un equipo renovado.
La racha de 14-0 al inicio de la segunda mitad fue clave para frenar las esperanzas de Filipinas de llegar a la final. Esto se está convirtiendo en una tendencia, y será interesante ver si pueden mantener este impulso en su último juego.
Filipinas anotó su primer punto de campo seis minutos después de iniciado el tercer cuarto y sintió la ausencia de Justin Brownlee en la ofensiva. Los esfuerzos defensivos de Leo Meindl y Georginho De Paula sobre el “Michael Jordan de Filipinas” fueron cruciales. Marcelinho Huertas también aportó con 13 puntos y 6 rebotes.
La ausencia de Kai Sotto fue significativa en la protección del aro y en la ofensiva interior de Filipinas.
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