Un rival al alza. El Iberostar Tenerife retorna este sábado a la máxima exigencia competitiva, tres días después de su último reto europeo, para recibir a un complicado San Pablo Burgos (Santiago Martín, 19:00 hora insular, Movistar Plus dial 56). No será nada fácil tumbar a un adversario al alza, que ha mejorado considerablemente prestaciones con respecto al cruce de la primera vuelta (65-81 para los aurinegros)
Cumplido ya el casi inevitable peaje por su condición de recién ascendido, el grupo de Diego San Epifanio remontó un difícil inicio de competición (0-7) para salir del sótano de la tabla, escalar hasta el 15º puesto, con un balance de 6/12), y convertirse en un bloque muy sólido, con los roles muy bien repartidos y especialmente peligroso a domicilio.
Los burgaleses han ganado en cuatro de sus últimas salidas (Zaragoza, Andorra, Badalona y Bilbao) y se antojan un adversario difícil de batir. Los tinerfeños encaran el reto con las bajas de Richotti, Akognon y Vasileiadis; la duda de San Miguel, con una sobrecarga en el isquio; y con el recién llegado, Tobias Borg, ya disponible; mientras que los visitantes no podrán contar con el lituano Deividas Gailius,operado el domingo de la muñeca.
El oficio de Thomas Schreiner; la chispa de Corey Fisher o del ex NBA, Jenkins, un anodator puro; la solidez de Álex López, la versatilidad de Javi Vega, la buena mano de Edu Martínez, o el poder interior de Sebas Sáiz, Goran Huskic y Deon Thompson, serán algunos de los argumentos a contrarrestar por los aurinegros.
Nota de prensa Iberostar Tenerife
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