Con 23 puntos, el alero NBA volvió a ser la estrella de una Croacia que pasó apuros para derrotar a una Hungría compacta aunque con escasos argumentos
Croacia sufrió para sacar adelante su primer partido del EuroBasket, ante una Hungría con argumentos escasos pero exprimidos hasta el punto de poner en problemas a uno de los destacados del Grupo C.
El 0-6 inicial fue un espejismo para los balcánicos, que pronto vieron como Hungría empataba el encuentro. Con un parcial de 7-0 y el apoyo de la afición desplazada a la vecina Rumanía, los de Stojan Ivkovic se ponían por delante en la recta final del periodo inaugural (18-15).
Ante la adversidad, Croacia aplicó la misma receta que le había llevado a los Juegos Olímpicos: Bojan Bogdanovic. El alero de los Indiana Pacers colocó su capacidad ofensiva como principal argumento para surtir de puntos a su equipo. Terminaría con 23 tantos (5/6 en tiros de dos, 1/5 en triples y 10/11 en tiros libres), y la sensación de que los suyos tienen un hombre al que agarrarse cuando soplen vientos adversos, además del trabajo de Dario Saric (15 puntos).
La voluntad húngara no fue suficiente. Su naufragio desde el 6,75 (5/29, un triste 17%) le impidió optar a cotas mayores, aunque su consistencia en los primeros cuartos les hace soñar con un viaje a la siguiente ronda.
Nota de prensa ACB • Foto: FIBA
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