La Mamba vasca está jugando menos tiempo que nunca en las últimas siete temporadas
Su productividad ofensiva por minuto es la mejor de su carrera
Darío Brizuela ha sido el mejor anotador entre los nacidos en España durante cuatro temporadas consecutivas. El curso pasado finalizó en el puesto doce de la clasificación general con 13’8 puntos por partido, misma posición que en la 20/21 con 13’9, mientras que en el curso 19/20, en el que cambió de Movistar Estudiantes a Unicaja en medio de la competición, fue el noveno con 13’5. Su mejor año en este aspecto fue en 2019, cuando finalizó en cuarta posición con 14’7, solo por debajo de Nico Laprovittola (17’2), Askia Booker (15) y Stan Okoye (14’8).
Al revisar la tabla de anotadores de esta temporada tras 19 partidos, vemos que el máximo anotador español es Marc Gasol con 11’7, seguido de Santi Yusta con11’6. Ambos ocupan los puestos 18 y 19 de la general. En el 25 están los 11’2 de Jaime Fernández y en el 32 los 10’5 de Quino Colom. No encontramos a Brizuela hasta casi el final de los 50 primeros, concretamente en el puesto 48. Sus 9’7 son la primera vez que no alcanza la decena desde el curso 18/19.
Esto nos puede llevar a pensar que Darío no está en su mejor momento anotador, pero la realidad es bien diferente y la explicación es muy sencilla: tras superar los veinte minutos de media en esas cuatro temporadas, este curso su promedio es de tan solo 15:32. Desde que es jugador ACB de pleno derecho, solo en la 16/17, cuando coincidió con un Edwin Jackson en plan MVP, estuvo menos tiempo en cancha.
De este hecho podríamos otra vez sacar una conclusión equivocada como sería la de pensar que Ibon Navarro cuenta menos con el escolta donostiarra, pero ni mucho menos. El entrenador vitoriano quiere un Unicaja con un juego físico e intenso, para lo que son claves las rotaciones. Los malagueños son el único equipo cuyo jugador que más tiempo está en cancha no supera los 22 minutos por partido. Nihad Djedovic tiene una media de 20:29 para liderar en este aspecto a una plantilla en la que doce jugadores superan los 11 minutos, marcando el límite por abajo Yankuba Sima, que acaba de llegar y juega 11:43. De los otros 17 equipos hasta 11 tienen uno o más jugadores por encima de los 25 minutos de media y solo hay tres, contando a Unicaja, con su jugador con más minutos por debajo de 23 minutos.
La estadística del USG%, que mide el porcentaje de posesiones finalizadas por un jugador en su tiempo en cancha, nos muestra la confianza de Navarro en las capacidades ofensivas de Darío Brizuela. La Mamba vasca es el séptimo de toda la ACB con 29’6%. Solo lo superan a día de hoy Markus Howard (35’1%), Dragan Bender (32’5), Shannon Evans (32’1), Jaime Fernández (31), Marcelinho Huertas (29’7) y Jerrick Harding (29’6). La temporada pasada, Brizuela fue el tercero con 29’7 tras Evans y Huertas, mientras que en la 20/21 finalizó sexto con 29’1. Es decir, que Ibon Navarro sigue dando las llaves del ataque de Unicaja a Darío en el tiempo que está sobre la pista y el escolta sigue haciendo el mismo tipo de juego que ha hecho casi toda su carrera.
Unicaja ocupa actualmente el quinto puesto con 13 victorias y 6 derrotas, siendo un equipo alabado por la prensa especializada, tanto local como nacional, y, lo que es más importante, recuperando la pasión de un público algo desencantado por las anteriores temporadas. No cabe duda que la unión de Ibon Navarro y este histórico club está siendo todo un éxito, confirmando ese buen funcionamiento del sistema implantado por el vitoriano. Pero es que además también podemos decir que lo es a título individual para Darío Brizuela.
El descarado jugador cuya formación comenzó en el Easo SBT de San Sebastián está promediando sus mejores números ofensivos por minuto de su carrera. Por cada 40 minutos sus medias son de 24’9 puntos, 6 asistencias y 21’2 de valoración. En puntos está ligeramente por encima de los 24’8 de la temporada pasada y de los 24’7 de la 18/19, su mejor temporada numérica individual, mientras que en asistencias supera con creces las 5’3 de la 20/21. En valoración solo está por debajo de los 22’4 de la mencionada 18/19.
Queda claro que cuando vemos sonreír a Darío Brizuela este año no solo es por su reciente paternidad y por la buena marcha de Unicaja, que son los motivos más importantes, si no porque sigue disfrutando como siempre y con más productividad que nunca a pesar de estar menos tiempo sobre la cancha.
Y en la Basketball Champions League juega más minutos y también acribilla los aros europeos con 11,1 puntos en 18 mientras nos hace disfrutar a todos los aficionados del baloncesto español.
No preguntes que puede hacer el equipo por ti, pregunta que puedes hacer tú por el equipo.
