La NBA ha decidido apartar a Draymond Green de manera indefinida, tomando esta medida drástica después de que previamente lo suspendieran por cinco partidos debido a su agresión a Gobert. A pesar de la aparente lección aprendida, Green reincidió al propinar un golpe a Jusuf Nurkic en el enfrentamiento contra los Suns, forzando a la liga a tomar acciones más enérgicas frente a sus comportamientos reiterados de carácter antideportivo
El comunicado oficial de la NBA señala que la suspensión indefinida se considera necesaria dada la extensa historia de Green involucrado en situaciones violentas. De acuerdo con las condiciones establecidas, el jugador deberá cumplir una serie de requisitos antes de poder regresar a la cancha, similar a lo que se hizo en el caso de Kyrie Irving, aunque por motivos distintos, cuando compartió contenido antisemita en sus redes sociales.
Esta sanción acarreará a Draymond pérdidas económicas de 154.000 dólares por cada partido que se pierda. Si la suspensión se extiende a más de 20 encuentros, la multa aumentará a 203.000 dólares. Dada la falta de claridad respecto a las condiciones a cumplir, resulta complicado establecer una fecha aproximada para su retorno. Sin embargo, parece plausible asumir que esta suspensión será más prolongada que la anterior, dejando al equipo de Kerr sin su ala-pívot durante un período considerable.
Internamente, Mike Dunleavy Jr., el gerente general de los Warriors, tiene programada una reunión con Rich Paul, el agente de Green, para abordar la situación. Ambos discutirán sobre cómo brindar orientación y apoyo al jugador en adelante.
Fuente: @wojespn · Foto: AP
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