Covirán Granada logró una victoria contundente sobre el Bàsquet Girona con un marcador final de 52-82, despojando de dudas su capacidad en esta temporada. El equipo granadino, que no había logrado vencer a los catalanes desde su ascenso conjunto a la ACB, puso fin a esa racha negativa en un partido en el que demostraron un notable rendimiento colectivo
El partido comenzó de manera imprecisa para ambos equipos, con fallos constantes en los lanzamientos. Sin embargo, con la entrada de Jonathan Rousselle y Jacob Wiley en la cancha, el equipo visitante empezó a mostrar un mejor juego, especialmente en el ataque, destacando en el juego interior y en la precisión desde la línea de tres puntos. Edgar Vicedo fue clave en el primer cuarto con dos triples que permitieron a los granadinos adelantarse 10-14 al final del periodo.
A partir del segundo cuarto, Covirán Granada impuso su ritmo, liderado por un Rubén Guerrero que mejoró su desempeño respecto a su inicio en el partido. Con el marcador 12-24, los andaluces mostraron una sólida defensa que dejó a su rival casi sin opciones de ataque, limitando a Girona a tan solo dos puntos en cinco minutos.
El tercer cuarto fue decisivo, con una destacada actuación de Amine Noua, quien enfrió cualquier intento de remontada del equipo local. Girona no tuvo respuesta ante una defensa férrea y un ataque granadino eficiente. La ventaja se amplió a un inalcanzable 38-60 al finalizar el periodo.
El último cuarto solo sirvió para confirmar el dominio de Covirán Granada, que cerró el encuentro con un resultado que les permite afrontar el futuro con optimismo y confianza.
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