Brandon Paul y Punter lideraron a un Olympiacos carente de presión. Jugaban contra el líder invicto y se les notó en ese modo de “todo que ganar y nada que perder”. El CSKA siempre estuvo incomodo, como aprendiendo a jugar sin su estrella lesionada para toda la temporada, Clyburn
El CSKA empezó mejor, llegando a coger ventajas de 11 puntos (29-18), pero justo en ese momento la inercia dominadora de los locales desapareció con la irrupción de Printezis, que anotó 9 de sus 11 puntos, además de 5 rebotes al final del encuentro, para liderar a los griegos a un parcial, que no solo les permitió limar distancias, si no que se permitieron el lujo de llegar al descanso con un solvente (39-43).
Hackett tenía que abandonar el partido por unas molestias, igual que Papanikolaou, así que los jugadores determinantes tenían que dar un paso al frente (60-64) tras un tercer cuarto muy igualado, los minutos más parejos de lo que llevábamos de partido.
Alguien tenía que poner el cascabel al gato, y este fue el Olympiacos, en la figura de Paul (20 puntos 6 rebotes), que anotó los triples en ese momento donde te lo estas jugando todo, (69-76) a 2 minutos para el final. El CSKA intentó reaccionar, pero esto ya no se le iba a escapar a los griegos. La primera derrota del CSKA en la temporada ya era una realidad. Los griegos se colocan con (2-3) con esta victoria, y se dan un golpe de moral de los buenos.
Además de Paul y Printezis, Punter terminó con 16 puntos, Cherry 9, y tres jugadores con 8, Rubit, Spanoulis y Kuzminskas.
James (22 puntos 6 rebotes 5 asistencias) intentó liderar sin éxito, Hines (19 puntos) y Hillard (17 puntos), los mejores por parte local.
foto: euroleague media
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