Los Lakers se imponen ante unos inconsistentes Pelicans, 108-124

Después de un partido discreto ante Golden State, Luka Doncic resurgió con fuerza en el Crypto.com Arena y lideró a Los Angeles Lakers en la victoria por 124-108 sobre los New Orleans Pelicans. El esloveno firmó una actuación imponente con 35 puntos, incluidos 11/11 desde la línea de tiros libres, su mejor registro de la temporada, y fue el principal catalizador de un equipo que empieza a mirar hacia los playoffs con otra cara

La noche también sirvió para confirmar el excelente momento de Austin Reaves, que volvió a brillar con 30 puntos y una presencia constante, mientras que LeBron James, como siempre, aportó en todas las facetas del juego con 27 tantos, manteniendo la serenidad y el control en los momentos clave. Con esta victoria, los Lakers consolidan su posición en la tercera plaza del Oeste, por delante de Nuggets y Warriors.

El encuentro comenzó con los locales atascados, sin chispa y con una defensa que no encontraba forma de frenar a un encendido Jose Alvarado, quien firmó 18 puntos en el primer cuarto con un 7 de 9 en tiros. Los Pelicans, gracias a esa actuación individual, se pusieron por delante 28-33 al final de los primeros doce minutos.

Sin embargo, todo cambió en el segundo cuarto. Doncic, tras fallar sus primeros siete lanzamientos, despertó con una bandeja tras asistencia de Jordan Goodwin que encendió el motor tanto del esloveno como del equipo entero. A partir de ahí, los Lakers se mostraron impecables dentro del arco, firmando un 9/9 en tiros de dos durante el segundo parcial y dándole la vuelta al marcador hasta llegar al descanso con un sólido 62-53.

La actuación de Doncic fue una declaración de intenciones tras el bache de la noche anterior. El esloveno, criticado por su defensa ante Golden State, recuperó protagonismo con una noche casi perfecta desde la línea, ayudando a que los Lakers terminaran el partido con un excelente 26 de 28 en tiros libres. Además, fue clave para mantener la fluidez del ataque y generar ventajas constantes desde el bote y el pase.

Le acompañó un Austin Reaves letal, capaz de anotar desde múltiples registros y de asumir responsabilidades cuando LeBron descansaba. El de Arkansas sigue demostrando que puede ser una tercera espada fiable, y sus 30 puntos (con un 8/9 en libres) lo reflejan con contundencia.

LeBron James, con su habitual maestría, sumó 27 puntos, pero también dirigió el ritmo de partido con su lectura de juego y control de los tiempos. A sus 39 años, continúa siendo un faro tanto ofensiva como defensivamente, y dejó varios destellos de su talento con penetraciones implacables y decisiones precisas en transición.

Una de las notas más positivas para los Lakers fue ver a Dalton Knecht reencontrarse con el aro. El novato, que apenas había sumado 14 puntos combinados en sus últimas seis apariciones, aportó 12 puntos sólidos, mostrando confianza y agresividad en sus tiros. Su rendimiento podría convertirse en un plus inesperado si logra continuidad en este tramo final de temporada.

En el lado visitante, Jose Alvarado fue lo mejor con 27 puntos, igualando su mejor marca del curso. Karlo Matkovic añadió 15 tantos, pero las bajas, la inconsistencia ofensiva y la falta de intensidad defensiva volvieron a pasar factura. Cuarta derrota consecutiva como visitante para unos Pelicans que parecen haber perdido el pulso en este tramo crucial.

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