Shai Gilgeous-Alexander ofreció un espectáculo de baloncesto al guiar a los Oklahoma City Thunder a una arrolladora victoria de 141-106 sobre los Charlotte Hornets. Con su regreso a la cancha, demostró por qué es el máximo anotador de la liga. Su precisión fue letal: 13 de 18 tiros, complementados por 6 rebotes y 9 asistencias, cerraron su noche antes del último cuarto
El equipo dirigido por Mark Daigneault sigue mostrando su consistencia: a pesar de las lesiones que dejaron fuera a jugadores clave como Lu Dort y Jalen Williams, los Thunder se aseguraron el primer puesto de la Conferencia Oeste por segunda temporada consecutiva. La victoria no solo reafirma su hegemonía, sino también la profundidad de su plantilla, con un Chet Holmgren versátil, sumando 14 puntos, y un Kenrich Williams electrizante que cerró el segundo cuarto con un triple inolvidable.
Charlotte, liderada por Miles Bridges con 20 puntos, intentó mantenerse a flote desde la línea de tres, pero cedió ante el dominio físico y estratégico de Oklahoma City. Los Hornets echaban de menos a sus estrellas LaMelo Ball y Mark Williams, fundamentales en su reciente triunfo ante los Knicks.
El momento decisivo llegó en el tercer cuarto: cuando los Hornets habían logrado acercarse 75-65 gracias a un triple de DaQuan Jeffries, los Thunder respondieron con una racha de 20-3 que acabó con cualquier esperanza de remontada.
La superioridad en la pintura fue una declaración rotunda: 64-26 a favor de Oklahoma City, sellando un partido que consolida su lugar como el equipo a vencer en la Conferencia Oeste.
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