Con un mega pabellón nuevo a la vista y un proyecto tremendamente ambicioso, los Warriors tendrán que sacar la calculadora para mantener a sus estrellas, pero por lo visto no van escatimar en gastos a pesar del temido impuesto de lujo, para retener a todas sus estrellas, entre ellas Durant y Thompson que terminarán contrato al final de temporada
Kevin Durant y Klay Thompson se convertirán en agentes libres a partir de julio, y será un antes y un después para los Warriors, porque ambos jugadores, con sus manos llenas de anillos, ahora no van a querer concesiones con su salario, querrán ir al máximo que les permite el convenio.
Hay que recordar que los ahora mismo los Warriors se gastan 195 millones de dólares en sus jugadores, de los cuales 50 son como penalización en impuesto de lujo, y la temporada que viene, si la franquicia pagará el máximo tanto a Durant como a Thompson, las cifras se irían a 300 millones, 170 de penalizaciones.
Y es que Thompson ha reconocido que quiere quedarse, pero que a diferencia de otras veces no va a perdonar dinero, que quiere lo que le pertenece, el máximo salarial, y lo mismo ocurre con Durant, que lleva años firmando por menos de lo que podría cobrar, y ahora también pedirá el máximo.
Esto unido a que Curry ya cobra su máximo, las cuentas son sencillamente de locura, sin olvidarnos que Green termina contrato en el 2020.
No lo va a tener nada fácil los Warriors para mantener su grupo de estrellas a lo largo de los siguientes años, le va a costar mucho dinero hacerlo.
Fuente: espn.com · Photo NBA Media
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