En una tensa y ruidosa contienda, fue el lado finlandés de las gradas el que más animó al final. Finlandia tenía que ganar para evitar la eliminación y se impuso por 98-88 a la República Checa para sellar su pase a Berlín
Punto de inflexión: Finlandia mandó de principio a fin, pero una correosa República Checa se arrastró hasta ponerse a un solo dígito y trató de hacerlo interesante en los últimos cinco minutos. Lauri Markkanen no tenía intención de permitirlo. Una canasta de tres puntos y un mate en el callejón hicieron que el público de Praga se pusiera en pie y que los Susijengi fueran ovacionados al abandonar la pista.
Jugador TCL del partido: Lauri, Lauri, Lauri… Markkanen está en un estado de forma increíble, hizo 34 puntos con 10 rebotes en este, lo que significa que ha conseguido su segundo doble-doble de 30 puntos en cuatro partidos.
Las estadísticas no mienten: no se puede hacer mucho cuando Finlandia acierta 15 de 32 desde más allá del arco. Sasu Salin es responsable de cinco de ellos, todos ellos en los primeros 25 minutos del partido.
En resumen: Finlandia cumplió con su parte, y buscará terminar con un 3-2 para conseguir un mejor emparejamiento en los octavos de final. Incluso si pierden ante Holanda en su último partido en Praga, y hay un empate a tres con Finlandia, Israel y la República Checa, el equipo de Lassi Tuovi no sería el extraño.
La República Checa tiene una última oportunidad contra Israel, si Serbia le ayuda con una victoria el martes. Tomas Satoransky volvió a estar activo y repartió 10 asistencias en 25 minutos de trabajo. Vojtech Hruban lideró la anotación con 22 para el entrenador Ronen Ginzburg.
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