Entretenida madrugada en la NBA con hasta 9 partidos entre los que destacan la victoria de los Celtics en casa ante San Antonio -tres derrotas seguidas-, el vendaval ofensivo de los Warriors en LA, un Porzingis superlativo en el Madison y un Simmons que sigue maravillando en la liga. Utah, invicto en casa. Gentileza de fullbasket.es
No podemos empezar con otra cosa. Toca hablar de Kristaps Porzingis, que por quinto partido esta temporada superó los 30 puntos en su cuenta personal -ningún jugador de los Knicks lo había logrado en los seis primeros partidos de una temporada-. Ya es una realidad que sin Melo, el letón se ha erigido como el buque insignia de la franquicia neoyorquina. Y cabe decir que hay un evidente cambio de imagen en los Knicks como colectivo, sobre todo a nivel defensivo, con una concepción mayor del juego. Anoche ganaron a los Nuggets tras una exhibición ofensiva en la primera mitad, aunque Denver llegó con vida al final gracias a un parcial de 27-2. Pero no se culminó la remontada porque Hardaway lo impidió con tres triples casi consecutivos.
Como decíamos, Porzingis fue el mejor del encuentro. 38 puntos, 7 rebotes y 3 tapones. 5 triples, 14 de 26 en tiros de campo y una sensación de control absoluto de todo lo que está haciendo. Tiene 22 años y su techo es ilimitado. El Madison ya no recuerda aquellos abucheos de la noche del Draft. Son todo aplausos y piropos. Es el nuevo Rey de la Gran Manzana.
Pero la noche NBA nos dejó muchísimo más. En Los Angeles, los Warriors le endosaron 141 puntos a unos Clippers que no pudieron hacer nada ante el recital de Stephen Curry, que se fue a 31 puntos con un 7 de 11 en triples. Hasta el Staples gritó en algunos momentos ‘MVP, MVP’. Tras perder en casa ante Detroit, los de Kerr se desquitaron ante los de Doc Rivers.
Emocionante partido en Miami que se llevaron los Timberwolves tras una prórroga preciosa. De hecho, como el partido en sí. Dos equipos a corazón abierto, jugando sin complejos y desplegando todo su potencial -ofensivo, sobre todo-. Los de Thibodeau siguen sin dar con la tecla atrás, pero la producción individual de sus referencias ayudan a ganar partidos. Pese a los 33 puntos de Waiters (22 entre cuarto periodo y prórroga), los lobos se llevaron el gato al agua. Teague, brillante en la dirección una noche más, mientras que Towns se fue hasta los 20+12.
El Sixers-Rockets fue un partido interesante que nos sirvió para corroborar, una noche más, que Simmons es candidato número uno a llevarse el premio a Rookie del año. Ha valido la pena esperar un año para verle en acción. El base de Philly estuvo soberbio ante Harden, terminando con 24 puntos, 7 rebotes y 9 asistencias. Secundado por Embiid (22+9+5), los Sixers ganaron en Houston. De Simmons hay que destacar su notable tiro tras bloqueo a media distancia, aunque es su intensidad atrás y su físico en transición el que le convierte en un jugador completo. Todo el juego de Philadelphia pasa por sus manos, marca el ritmo. Harden se fue a los 29 puntos, pero a los texanos les pasó factura una madrugada más su falta de acierto en el tiro exterior (27%).
Partido con aroma a Playoffs en el TD Garden. Los Celtics ganaron en casa a San Antonio -tres derrotas seguidas- a base de picar piedra. Aunque los texanos amenazaron con romper el partido en el segundo periodo a base de triples -con Paul y Forbes como estiletes-, Irving se puso el mono de trabajo y los de Stevens comenzaron a jugar a otro ritmo. El base se fue hasta los 24 puntos, secundado por Brown (18) y un correcto Rozier (12), osado como pocos en ataque. Destacar otra vez la defensa de Al Horford y Baynes. Aldridge acabó asfixiado y Gasol (11+8+4) no bastó. El último cuarto ya no tuvo historia (95-76 a falta de siete minutos para el final).
Siguen sin hacer ruido y ganando partidos. Los Toronto Raptors son cuartos en el Este con un balance de 4-2 tras vencer anoche a los Blazers de Lillard (36 de los 85 puntos de su equipo). Con Lowry rozando el triple-doble, cabe destacar el encuentro de Lucas Nogueira, autor de 17 puntos, 9 rebotes y 5 tapones. Sin Ibaka ni Valanciunas dio un paso adelante.
Recuperó la senda del triunfo Orlando en la pista de los Pelicans en un partido que controlaron de principio a fin con un ritmo ofensivo muy alto. Fournier, Vucevic y Simmons acabaron con 20 puntos cada uno, mientras que Speights aportó 18 desde el banquillo, siendo una de las sorpresas de la noche. Con un Cousins lastrado por las faltas y un 7/28 en triples, los de New Orleans no tuvieron opciones. Anthony Davis, monstruoso (39+10), aunque sin premio.
Habían ganado la madrugada anterior al mejor equipo del Este, los Magic, y esta madrugada superaron al mejor del Oeste, los Grizzlies. Los Hornets parecen haber encontrado la dinámica y ya tienen balance positivo (4-3). En Memphis fueron capaces de alzarse con la victoria tras un último cuarto magnífico (31-17), encabezados por Kemba Walker (27 puntos y 6 asistencias) y un acertado Monk (13 puntos). Marc, discreto (10+7).
Acabamos en Utah, donde los Jazz siguen invictos en casa tras doblegar a los Mavericks, el peor equipo de la Conferencia Oeste. Y eso que Nowitzki acabó con 18 puntos y Barea por momentos parecía no fallar nada, pero la lógica acabó imperando y los de Salt Lake City celebraron otro triunfo como locales. Hood se alzó hasta los 25 puntos, mientras que Ricky terminó con 20 -8 de 15 en tiros de campo, 4 triples- y repartió 6 asistencias. El parcial de 15-32 del tercer periodo, determinante.
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