Harrison Barnes vivió una noche de redención al convertirse en el héroe inesperado de los San Antonio Spurs con un triple en el último segundo, sellando una victoria por 114-111 contra los Golden State Warriors. Apenas instantes antes, Barnes había cometido una falta crucial sobre Draymond Green, quien anotó dos tiros libres para empatar el marcador a 111 con apenas tres segundos en el reloj. Pero Barnes, mostrando nervios de acero, lanzó un triple sobre Jimmy Butler para dar la victoria a los Spurs
Keldon Johnson fue determinante para el equipo de San Antonio, destacando con 21 puntos, incluidos dos momentos cruciales en los últimos segundos: una bandeja para poner a los Spurs al frente y un tiro clave que empató el partido momentos antes.
Stephon Castle también brilló con sus 21 puntos, contribuyendo a romper una racha de tres derrotas consecutivas y dándole a los Spurs apenas su segunda victoria en los últimos diez encuentros.
Por el lado de los Warriors, Stephen Curry continuó deslumbrando al sumar 30 puntos y cinco triples, alcanzando así la histórica cifra de 300 triples en una temporada por sexta vez en su carrera, algo que solo él ha logrado en la NBA. A pesar de su esfuerzo, los Warriors enfrentaron una noche complicada en casa, viéndose afectados por la eficiencia de los Spurs desde el perímetro.
Jimmy Butler se esforzó hasta el final con 28 puntos, de los cuales 13 llegaron en el último cuarto, mientras que Draymond Green aportó una actuación versátil con 13 puntos, nueve rebotes y ocho asistencias.
Esta derrota significa un golpe para los Warriors en su lucha por asegurar un puesto directo en los playoffs, complicando sus posibilidades de evitar el torneo de play-in.
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