La pasión turca. Ganó el equipo que más creyó, el que más sentimiento puso, también el que más lo necesitaba. Victoria de Anadolu Efes, ante un F.C. Barcelona que se vio superado en todo momento y que no fue capaz de imponer su estilo de juego. Derrota sin paliativos de los de Jasikevicius, que lo intentaron, pero que se vieron desbordados ante un gran Shane Larkin y sobre todo un excelso Vasile Micic. El jugador serbio dio toda una clase práctica, de cómo se domina un partido. Sus veintiséis puntos y cinco asistencias lo dicen todo
La Euroliga, sin duda, es uno de los manjares más deliciosos de ver hoy en día. El duelo Nikola Mirotic-Vasile Micic, en estos primeros compases de partido, es caviar para los paladares más exquisitos. Salió más concentrado desde el pitido inicial el equipo turco, que anotó la primera canasta en juego, merced a un triple de Micic y ya no perdió la ventaja en el marcador en toda la primera parte. El único capaz de anotar por el bando culé, no era otro que Nikola Mirotic, autor de los primeros ocho puntos del Barcelona. Micic por su parte no se quedaba atrás y con siete puntos, sacaba todo su repertorio a pasear y hacía lo que quería con la defensa azulgrana. Los errores locales se sucedían, el pívot visitante Sertac Sanli hacía daño en la pintura y tras un triple del francés Beaubois, Jasikevicius se veía obligado a pedir un tiempo muerto en el minuto nueve, tras el 18-25 en el marcador.
Comenzó el segundo cuarto con un triple de Kyle Kuric para reducir distancias 25-27, que contrarrestaba rápidamente Shane Larkin con otro lanzamiento exterior. Jasikevicius cambiaba continuamente de hombres, en busca de soluciones que no llegaba a encontrar y Anadolu Efes se escapaba en el marcador 26-33. Si no anotaba Larkin, Chris Singleton castigaba con un triple. A este último se le vio especialmente motivado ante su exequipo, anotando trece puntos en la primera mitad. Si en el primer cuarto el hombre azulgrana fue Mirotic, en este segundo no fue otro que Kyle Kuric. El de Indiana mantuvo a flote a los locales, pero el atasco azulgrana era latente y poco a poco, Efes mucho más asentado en el juego, lograba a alcanzar los diez puntos de diferencia mediado el segundo cuarto (34-44) y Saras se veía obligado a pedir otro tiempo muerto. Tras el parón, un triple de Calathes, hizo entrar a los culés en el partido y con otro triple de Brandon Davies desde medio campo y sobre la bocina, conseguían reducir el marcador con el 50-53. Una canasta esperanzadora para el equipo azulgrana y que dejaba al descanso, todo por decidir.
El devenir del partido parecía un flashback. El F.C. Barcelona, como ocurriera en el pasado encuentro liguero ante el UCAM-Murcia, entró más enchufado tras el descanso y conseguía poner las tablas en el marcador 58-58. Pero fue un espejismo. Tanto nadó el equipo azulgrana, que al final se ahogó en la orilla. Micic cogió las riendas del encuentro, impuso su ritmo de juego y Efes volvió a escaparse en el marcador de nueve puntos 58-67, pasado el ecuador del tercer cuarto.
Los últimos diez minutos siguieron teniendo la misma tónica del partido. El equipo dirigido por Ergin Ataman cortocircuitó a un Barcelona impotente. Jasikevicius, con otro tiempo muerto cuando quedaban sólo siete minutos para el final, buscó cortar la ofensiva turca que ya superaba los diez puntos de ventaja, 65-76, pero no lo logró. Daba la sensación, que podrían haber estado jugando toda la noche y no habría sido suficiente. Un último arreón local a falta de poco más de un minuto para el final de partido pareció dar un poco de emoción al reducirse la ventaja a seis puntos 78-84. Ataman llamó al orden a los suyos, que parecían haberse relajado, aunque no logró su propósito. Los de Saras sacaron su carácter ganador y se acercaron a tan sólo dos puntos dentro ya del último minuto 86-88, pero ahí se acabó todo. No dio tiempo a más y se confirmó la séptima derrota en Euroliga de los azulgranas y primera de este 2021.
foto: euroleague media
Redactor · Opinión · NBA · Liga Femenina
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