El Real Madrid venció al Zalgiris Kaunas en el regreso de la Euroliga al WiZink Center cinco meses después del quinto partido contra el Partizan. Los de Chus Mateo volvieron a lucirse en ataque, sobre todo en la primera parte (53 puntos) y en el último cuarto, donde sentenciaron su tercera victoria en la competición. Campazzo (18 puntos, 9 asistencias y 28 de valoración), Poirier (18, 7 rebotes y 28), Deck (19 y 17) y Rudy (9, 6 rebotes, 4 asistencias y 18), brillaron en un equipo en el que todos anotaron. Décimo triunfo oficial de la temporada para mantenerse invictos
Los madridistas se encontraron de inicio un rival que les plantó cara con un juego atrevido, cargando el rebote ofensivo y acertado cerca de canasta. Giedraitis y Ulanovas mantenían a los suyos en un intercambio de canastas con los de Chus Mateo durante buena parte del primer cuarto (13-14 min.7). Pero el Madrid tiene el acelerador puesto en ataque. Campazzo, que ya había avisado con cinco puntos, encadenó tres triples para un total de 14 puntos en los ocho minutos que estuvo en pista (15 de valoración). Otro triple entre medias de Yabusele abrió un parcial de 12-2 para irse a 25 en este acto (25-19, min.10).
Despliegue ofensivo
Zalgiris continuó aguantando con el aire fresco que les dio la entrada de Mitrou-Long. Se acercó a dos puntos con el 30-28 en el 13´. Pero el Madrid juega de memoria, tiene grandes recursos en ataque y muchas alternativas. Y cuando lo combina con la defensa, se transforma en muy difícil de parar. Rudy se presentó con dos triples seguidos e influía en todas las facetas del juego (4 asistencias y 4 rebotes). Sergio Rodríguez y Hezonja también metieron el suyo desde el 6,75, mientras que Poirier estaba en todas las acciones espectaculares. Los blancos volvieron a despegar con un parcial demoledor: 14-2 y dejando cuatro minutos sin anotar a los lituanos. Con un +14, hubo una reacción visitante que neutralizaron Campazzo, Causeur y Hezonja. Al descanso, el Madrid había anotado 53 puntos con 9 triples (53-43).
A los blancos les faltaba tener más continuidad atrás para romper el partido. El Zalgiris volvía a ver aro con demasiada facilidad de la mano de Evans. Eso le dio confianza para intentar igualar el choque. Los visitantes se meterían de lleno en la lucha mediado el tercer cuarto (55-52, min.16). Sin la clarividencia en ataque de la primera parte, el Madrid no desesperó. Fue paciente y se centró en cerrar su rebote. A partir de ahí, pudo salir al contrataque y recuperar su ritmo ofensivo. Deck, con 7 puntos consecutivos, resultó providencial en el +10 que cogieron para encarar el último cuarto (72-62).
Paso adelante en defensa
Lo dio el Madrid para acabar definitivamente con la resistencia lituana. Mostró su mejor nivel atrás, con un plus de intensidad. Poirier y Tavares echaron el cerrojo en la zona (acabaron con tres tapones cada uno). Y en ataque recuperaron sensaciones, con todos los jugadores aportando en su momento. Primero Llull con cinco puntos seguidos y un triplazo marca de la casa, Deck, Campazzo, que rozó el doble-doble (18 puntos y 9 asistencias) y el pívot francés. Poirier, con la inestimable ayuda de Sergio Rodríguez, estuvo soberbio en el tramo final (18 puntos). Suyas fueron las acciones más espectaculares que levantaron un día más al WiZink Center, que le despidió con una gran ovación (93-79, min.40).
nota de prensa Real Madrid
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