Después de la exhibición de Luka Doncic ante Argentina en la jornada inicial del Grupo C, había muchas expectativas por ver el choque de los eslovenos ante Japón, para confirmar si lo de Luka había sido una excepción o seguiría todo el torneo así. La respuesta fue la segunda. Otra vez fue desequilibrante desde el principio y Eslovenia se quedó con el triunfo 116-81. Doncic acabó con 25 puntos, 7 rebotes y 7 asistencias
Julio Lamas, tras la experiencia argentina, decidió no centrar su esquema defensivo en Doncic, aunque sí tratar de limitarlo. Para eso buscó siempre llevarlo a su izquierda y ponerle defensores atléticos y altos, que le complicaran el panorama, sobre todo Watanabe y Hachimura, aunque también Tanaka.
Doncic leyó la situación inmediatamente y buscó rápido darle de comer a sus compañeros, que hicieron un gran trabajo ofensivo y defensivo, porque de la misma manera, buscaron que solo anotara Hachimura, gran protagonista de la primera mitad, con 17 puntos.
El problema para Japón fue cuando Doncic se fue a descansar mediado el segundo cuarto y, tras rebajar a 6 la diferencia que llegaron a sacar los eslovenos de 12 (40-28), Prepelic tomó la batuta y demostró que saben jugar (sobre todo defender) sin Luka, poniendo la máxima (51-38), hasta que su líder retornó.
La prueba de fuego eslovena se dio promediando el tercer cuarto, cuando Doncic tuvo que salir obligado con 3 faltas, sin saberse cuándo volvería. Se esperaba que Japón aprovechara la situación, pero ocurrió lo contrario.
Y es que el efecto Doncic en cuanto a la confianza que genera en sus compañeros, permanece aún cuando él no está. Prepelic toma otro rol, varios se prenden en la tarea anotadora (Dragic, Tobey, Cancar, Blazic), y como siguen defendiendo con mucha intensidad, logran correr, a veces más que con Luka.
Para peor, Japón adolece de oficio y de picardía, y muchas veces peca de ingenuidad, y en eso los eslovenos son expertos. Si está Doncic, utiliza todas las armas, incluyendo su permanente presión y quejas antes los árbitros. Es como que todos se han acostumbrado a que Luka sea el que elige la música que se baila cada noche.
Eslovenia terminó controlando sin grandes problemas el trámite, porque cuando Japón le puso más presión al balón y se colocó a 14, volvió Doncic, agarró el reloj del partido, lo manejó a su antojo y se acabó la disputa.
El final fue 116-81 para los de Sekulic (cuarta vez en 6 partidos que pasan los 110 puntos sumando el Preolímpico de Kaunas y estos Juegos), y Luka otra vez pudo descansar bastante (jugó apenas 26 minutos). Igual, le dio para unos números asombrosos: 25 puntos (8/15 de cancha), 7 rebotes, 7 asistencias y 0 pérdidas, su única mancha negra ante Argentina (6).
Con este resultado, los eslovenos se aseguraron un lugar en los cuartos de final, ya que lo peor que podría pasarle es ser tercero con dos victorias. Hachimura, el anotador del partido con 32.
fuente: basquetplus.com · foto: fiba
CEO de Piratas del Basket
twitter personal: @raainaga
twitter web: @piratasbasket
mail: redaccion@piratasdelbasket.net