El Milán sigue en un estado de forma formidable y fue capaz de llevarse un partido muy trabajado ante un ALBA Berlín que nunca dio el encuentro por perdido y solo claudicó en el bocinazo final. Para Sergio Rodríguez fue un partido especial porque fue el mejor de los suyos y anotó su punto número 2.500 en la EuroLeague, que le coloca entre los históricos de la máxima competición europea
Con este resultado y a pesar de lo apretado que fue, marca un guión bien distinto para estos rivales, ya que el Armani Milán (4-1) sigue esperando el fallo de los invictos para atacar el liderato. Todo lo contrario al ALBA que a pesar de no ofrecer un mal baloncesto ya arrastra un balance (1-4).
Tras un parcial muy igualado en el primer cuarto (18-17), parecía que el encuentro se le podía torcer a los italianos después de no ver aro durante muchos minutos, y llegar al descanso con (33-26).
Pero el Milán supo reaccionar en el tercer cuarto y dejar la suerte del encuentro para el final (50-53). Un último cuarto que fue un toma y daca constante con ambos equipos dejando su mejor versión para el final. Pudo ganar cualquiera pero al final la moneda se decantó del lado azzurro.
Rodríguez (17 puntos 4 rebotes 4 asistencias), Scola (14 puntos 6 rebotes) otra vez vital. Nedovic volvió a las canchas con 12 puntos y 4 triples.
En el ALBA gran parte del juego pivotó en la pareja Siva (20 puntos) y Giedraitis (18 puntos 6 rebotes).
Foto: euroleague media
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