Dynamo de Kursk es el nuevo campeón de la Euroliga Femenina. El proyecto ruso dejado en las sabias manos de Lucas Mondelo y César Rupérez en el banquillo y Anna Cruz en la pista, logró superar al Fenerbahçe en la final (77-63) y hacer historia con un título en una temporada perfecta (18-0)
El triunfo se gestó en una primera parte donde tuvo que remontar un parcial 10-0 inicial y donde se cimentó una ventaja que incrementó al inicio del último cuarto para dejar sentenciada la final. Angel McCoughtry (20 puntos) y Nneka Ogwumike (19 puntos y 10 rebotes) hicieron valer su caché y superaron a Candace Parker (18 puntos, cinco rebotes y cinco robos) en el duelo de estrellas que deparó la final.
Pocos inicios más favorables se pueden pedir para un equipo en una final. Fenerbahçe tuvo la entrada en el partido soñada por cualquier aspirante al anillo y arrancó con un parcial 10-0. En menos de tres minutos Lucas Mondelo se vio obligado a solicitar un tiempo muerto. El técnico pidió a las suyas calma, cerrar el rebote y parar a Candace Parker. La estrella americana olvidó su mal día cara el aro de la semifinales y anotó seis puntos en ese fulgurante inicio de final.
El toque de atención sin duda que dio el efecto deseado en Dynamo Kursk y respondió al envite inicial con un parcial 0-7 con el que equiparó el inicio de encuentro. Angel McCoughtry fue la encargada de liderar la remontada y si fue capaz de anotar 11 de los 13 primeros de su equipo, su siguiente canasta significaría la primera ventaja rusa (17-18).
La ventaja de Fenerbahçe había desaparecido, pero cuanto menos Sandrine Gruda tuvo la capacidad e anotar sobre la bocina y cerrar el primer cuarto con su equipo nuevamente por delante. La canasta de la francesa sería casi un oasis en el desierto anotador turco porque Kursk ya había cogido la directa y encontraba anotaciones de diferentes jugadoras hasta que un triple de Kirillova y una canasta de Ogwumike puso 10 puntos arriba a las de Mondelo. La final había comenzado mal, pero en 10 minutos había endosado un parcial 11-31 y ya estaban con dobles dígitos de ventaja.
Candace Parker tuvo una segunda aparición fulgurante en el partido y apretó el encuentro, pero un nefasto minuto final de Fenerbahçe permitió que Prince (18 puntos y siete asistencias) y Ogwumike volvieran a establecer la ventaja en la máxima: 44-34.
Por un momento, la final estuvo a punto de romperse cuando un triple de Anna Cruz (cinco puntos y cinco asistencias) dio una renta de 18 puntos a Kursk (54-36), pero rápidamente Fenerbahçe reaccionó para dejar la diferencia nuevamente bailando en la decena de puntos al entrar en el último cuarto (62-55) con Alex Quigley castigando desde el perímetro (19 puntos).
En muchas ocasiones esa podría se una diferencia más que suficiente pues los nervios y la precipitación atrapan al equipo que está por debajo. Empero en este partido tan loco todavía mucho que verse y así el equipo turco llegó a ponerse a dos puntos de su rival. Entonces el combo de bajitas de Mondelo, Cruz y Prince, volvieron a estirar la ventaja para lograr un parcial 12-0 que ya sí resultó definitivo. Con poco más de dos minutos para el final el 74-60 fue una losa demasiada pesada para que Fenerbahçe la pudiera levantar. Mondelo y Cruz lo volvían a hacer, dos imanes para el éxito que se han reunido nuevamente en Rusia para seguir levantando títulos.
Nota de prensa Liga Endesa • Foto: FIBA
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