A pasión no nos gana nadie. En esta encuesta 5×5 sobre los pívots de la NBA de los años 90, por mucho que pesen Olajuwon, Moses Malone, Pat Ewing, Saquille Oneal y David Robinson, vamos a medirlos con sus electores, un buen cinco inicial formado por con Pope De las Heras, Emilio Guerrero, Jordi Perramon Rafa Ruiz y Sergio Vegas
Los cinco mitos de la NBA acumulan All Stars a mares pero nuestro quinteto suma décadas apoyando nuestro baloncesto, de hecho siguen hoy día, cada uno en su rol, ayudando a este deporte donde sobra egoísmo y falta más unión. Así que, un, dos, tres… ¡equipo!
JOSÉ MIGUEL DE LAS HERAS DÍEZ (POPE) Y MOSES MALONE
José Miguel de las Heras Díez, alias Pope, entrenador conocido en Bizkaia o al frente de clubes como Jarrilleros (Portugalete) o Santurtzi, aparte de crear otro como el portugalujo Boldreroak, es nuestro cuatro en este 5×5. Hoy vive en Maipú (Mendoza, Argentina), donde trabaja para lanzar un nuevo proyecto deportivo que mejore los puentes entre el baloncesto argentino y el español, y tiene como pívot favorito de los años 90 a Moses Malone.
“Cuando hablamos de Moses Malone estamos, a mi parecer, ante uno de los cinco mejores pívots de la historia de la NBA. La historia no le ha hecho tanta justicia como a otros porque probablemente no era muy espectacular, no tenía un gran salto, y su físico era más bien rocoso que atlético”.
“Muy poca gente sabe que esa dureza bajo los tableros de Malone posiblemente la adquirió cuando era joven y pedía permiso para ir a jugar a las cárceles contra los reclusos. Moses decía que cualquiera podía tirar de lejos pero… ‘yo voy directo al aro’, solía contar”.
“Sus números eran de otra dimensión, sin tener la altura de otros pívots de la época como Jabbar, Sikma, Eaton, Daugherty o Bill Walton, ha pasado a la historia siendo el mejor reboteador ofensivo. Su colocación e intuición sobre a donde iba la pelota solo ha tenido a Dennins Rodman como alguien que se ha acercado a sus seis títulos como máximo reboteador de la liga, por algo le apodaron The Chairman of the Boards, Gobernador de los Tableros”.
EN DATOS. Pope de las Heras profundiza:
“El añorado Moses Malone fue el primer jugador en ir del instituto a un equipo profesional, cuando fichó … en la ABA, todavía no tenía mucho peso, lo ganó al llegar a Houston, su primer equipo en la NBA. Con Houston alcanzó la final en 1981 pero la mejor temporada de todo su carrera fue la disputada en 1982-1983 con los Sixers de Philadelphia cuando promedió 31 puntos y 14,5 rebotes por partido. Hay dos imágenes que recuerdo perfectamente, una cuando se levantaba las gafas para lanzar los tiros libres y otra… la del día de su retirada, que narró el mítico Ramón Trecet, en un partido donde llegó a anotar una canasta desde el tiro libre de su propio campo y toda la cancha se puso en pie para aplaudirlo en uno de los siete triples que anotó en su carrera”.
“Diez veces All Star, tres veces MVP, MVP además de la final que ganó en 1983, cuatro veces parte del mejor equipo del año, cuatro parte del segundo mejor equipo, único jugador de la historia en promediar 20 puntos y 10 rebotes con cuatro equipos diferentes, ese era Moses Malone”.
EMILIO GUERRERO Y PAT EWING
El periodista malagueño Emilio Guerrero (@EmilioJGuerrero), a quien se puede escuchar en Cope Málaga y ver en “Zona Verde” (recomendable programa del canal 101 TV que se emite los miércoles con eco desde la web de esta televisión http://www.101tv.es/carta-zona-verde.aspx), es nuestro base. Curtido en tertulias que comparte con Anicet Lavodrama, entre otros sabios, la pasión por el deporte a Emilio hace que este quinteto para nuestro especial 5×5 tenga en él a un buen base y director de orquesta. Su favorito: Pat Ewing.
“Al fijarnos en los años 90 estamos hablando de la época en la coincidieron los pívots más dominantes de la historia del baloncesto. Para un chico como yo, que crecía viendo las revistas de baloncesto de su hermano mayor, la fijación fue a parar en el imponente Pat Ewing, primero por su descomunal físico que nos dejaba atónitos a todos y posteriormente por su indudable calidad. Hay quien le achaca que nunca ganara un anillo de la NBA, pero su impacto en esa NBA con los Olajuwon, Parish, Robinson o el mismísimo Abdul Jabbar fue brutal desde el primer día que pisó una cancha profesional”.
“Cuando era un crío, principalmente me fijaba en los puntos que metía Ewing. Excepto en sus últimos años, nunca bajó de los 20 puntos por partido. Pero con el tiempo gana valor el ver cómo conseguía esa anotación. Ayudado de su descomunal físico, tenía buenos movimientos en el poste bajo, no con la elegancia que Olajuwon, pero sí con similar eficacia”.
“Pat Ewing también tenía un buen tiro a 4-5 metros del aro que no era algo muy habitual en los hombres altos de entonces. Su capacidad para fajarse en el rebote de ataque le convertía en un hombre tremendamente difícil de parar. Luego con el tiempo te empiezas a fijar en otras cosas y descubres que defensivamente era un muro. Ayudado por sus 2,13 m y una tremenda envergadura, era un pívot muy difícil de superar y convertía a sus New York Knicks en un equipo tremendamente complicado de ganar”.
EN DATOS. Emilio Guerrero ahonda:
“Pat Ewing siempre ha sido un antihéroe. Me encantaba que sus Knicks fueran un equipo antipático sobre todo en esas míticas finales de 1994 y 1995 contra los Rockets. Ver a Jonh Starks desesperando con su juego a los rivales me encantaba. Esos Knicks con Charles Smith, Derek Harper, Charles Oakley o Anthony Mason eran un equipo que nunca daba el partido por perdido y a quienes había que ganar tres veces en un mismo duelo. Pero por encima de todo, me encantaba la clase y la filosofía de Pat Riley. Con anterioridad a ese periodo tampoco me puedo olvidar de los Knicks de Marck Jackson, que destilaba una clase tremenda o del espectacular Kenny Sky Walker, a quien años más tarde lo vimos jugar en el Granollers de 1991-1992”.
“Si me pongo a pensar respecto a cómo ha cambiado el juego interior de ayer a hoy en la NBA, no me termino de acostumbrar a este juego de ahora. De hecho, me llega a parecer aburrido cuando veo poca elaboración, mucho individualismo y abuso del tiro de tres. El baloncesto de antes me parecía de mucha más calidad técnica que el actual. Un pívot debía tener un decente juego de pies para fabricarse sus propias canastas, hoy día sólo unos pocos pueden generarse sus propias canastas al poste. Antes, para que el balón le llegara al pívot al poste debía haber una buena circulación de balón, buenos bloqueos y luego el talento del receptor. Hoy en día el center ha quedado, en la faceta ofensiva, para ser un mero finalizador de las ventajas que generan los exteriores y están muy limitados de recursos. En definitiva me parece un baloncesto mucho más pobre. Pero como me dijo un día Sergio Scariolo cuando le cuestioné por ello: ‘ese baloncesto no volverá a verse más y el rol de los pívots ya no es lo que era’, concluyó”.
“De los pívots de la NBA actual me quedo con Domantas Sabonis, su rendimiento y crecimiento es brutal y me parece tremendamente que desde España no sé le dé el valor que verdaderamente tiene para un jugador formado hasta los 17 años en Los Guindos y que ya he historia firmado dobles dobles cada noche que lo ponen a la altura de los mejores pívots de la historia de la competición. Destaco también Nikola Jokic, es de los pocos en la actualidad que tiene un excelso juego de pie, que amenaza dentro y fuera y con una visión de juego espectacular. Y en tercer lugar me decanto por Marc Gasol, es cierto que ya no está en su mejor momento, pero pocos pívots tienen ese conocimiento del juego. Es capaz de jugar tanto de cara cómo espaldas al aro y se ha sabido adaptar ‘al baloncesto moderno’ sabiendo abrirse para abrir campo y ser también una amenaza exterior. Como se aprecia la escuela europea es la que en mi punto de vista aún mantiene la esencia de los legendarios pívots de antaño”.
JORDI PERRAMÓN Y DAVID ROBINSON
Jordi Perramon es perfecto para jugar de cinco sin miedo a los contactos dentro de la zona de (no) confort en busca de rebotes o canastas pocos tan apropiados como Jordi (@guguseti). Desde Barcelona, elabora el recomendable blog http://pivotworld9.com y su polivalencia le hace colaborar igual en radio que en locos formatos audiovisuales como Galicia Basket. A valiente no le gana nadie.
“Para mi el mejor pívot de los años 80-90 es Olajuwon, pero como alguien se me ha adelantado os diré que otro de mis jugadores preferidos era el gran David Robinson, alias El Almirante. De si juego,sería difícil destacar algo por encima de todo, reboteaba, sabía jugar al poste (si, si, los pivots antes sabían jugar al poste, y ojo, de espaldas y todo), tenía capacidad de pase y defendía como un auténtico animal. Quizá lo más destacable sea que, siendo una superestrella, jugaba por y para el equipo, y cuando tocó apartarse para que otro fuera la estrella, no solo lo hizo, sino que además apoyo al emergente Tim Duncan para que fuera aun mejor jugador”.
“De los San Antonio Spurs de David Robinson me gustaba todo, su filosofía de juego, su forma de jugar, y sobre todo, que eran un equipo, no era un… pelota al bueno y que se casque un 1 contra 5. Los Spurs eran, y son. un equipo, que juega por y para el equipo”.
EN DATOS. Jordi Perramon añade:
“La verdad es que no soy yo muy amante de la deriva que esta tomando actualmente el juego, esa obsesión por el triple pienso que esta matando al baloncesto, convirtiéndolo en anodino, algo que en la NBA se ha exacerbado hasta la exageración (ejemplo el juego de Harden con su anterior equipo, Houston). Personalmente yo me levantaba de madrugada para verla NBA (que lo de #dormiresdecobardes no lo han inventado los de Movistar) y actualmente no me desvelo por ver ningún equipo de la liga estadounidense. Es más, me cuesta ver un partido entero, porque en general, me aburren”.
“De los pivots NBA actuales, me gustan poquitos. De Europa, sin duda alguna, me encanta Tomic. De la NBA, Embiid, porque sabe moverse tanto cerca como lejos del aro, Tavares también es un interior que me gusta mucho, pero en general soy un bicho raro al que le gustan los pivots tirando a clásicos y de esos, cada día quedan menos”.
RAFA RUIZ Y HAKEEM OLAJUWON
En el puesto de tres, con capacidad de jugar por dentro, tenemos a Rafa Ruiz Sánchez, que fue jugador en Salleko (Sestao, Bizkaia) y hoy es entrenador en el CB Oribeltza (Portugalete, Bizk.) y vocal en la directiva Asociación Vasca de Entrenadores de Baloncesto (AVEB). Licenciado en Periodismo, describe a su par como “un bailarín de claqué en la pista” sin temor a mirarle a la cara, ¡qué es de Bilbao!
“Hoy en día se habla mucho de grandes tiradores y de que cuanto más lejos de la canasta encesten más espectacular parece el juego, pero hubo un tiempo donde los jugadores grandes eran el centro de la NBA, la base sobre la que sustentar las franquicias con aspiraciones al anillo!.
“Wilt Chamberlain, Bill Russel, Kareen Abdul Jabbar, Olajuwon, Saquile O´Neal, Arvydas Sabonis, entre otros, eran superiores al resto dentro de la pintura, eran de los que intimidaban de verdad, siendo bien capaces de cambiar el arco de los tiros de sus rivales. Dentro de esta estirpe de jugadores siento predilección por un jugador llegado a EEUU desde África, en concreto de Nigeria, su nombre Hakeem Olajuwon, apodado The Dream (El Sueño), y con toda razón”.
EN DATOS. Rafa Ruiz pormenoriza:
“En sus inicios, Olajuwon creció al lado de un tal Moses Malone, todo un clásico All Star de los años 80 con mucha experiencia en la brega cerca del aro. A Hakeem le vimos con los Houston Rockets formando pareja luego con Ralph Sampson, las llamadas The Twin Towers, Torres Gemelas, mostrándose poderosos bajo los aros y mucho pero… que jamás pudieron con los Celtics liderados por Larry Bird, a la vera de Paris, McHale, etc. Así, Olajuwon tuvo que esperar para conseguir el ansiado anillo, y se desquitó con doble logro en los años 1994 y 1995”.
“Hakeem, con una envergadura de 2,13 cm, una coordinación y agilidad inusual en alguien de su tamaño, desarrolló una técnica individual envidiable, con notables movimientos al poste marca de la casa. Era capaz de anotar jugando de espaldas, de cara, de cerca, de lejos, eso sí, normalmente en terreno de dos puntos. Sus reversos, sus fintas o giros para finalizar tirando a una pierna eran y son de una elegancia extrema”.
“Y no por ser elegante dejaba de ser duro. En una entrevista, comentaba Saquile O´Neal: ‘Cuando Hakeem coge la posición no es posible moverlo de su espacio’. En las finales contra New York, Pat Riley diseñó mucho 2×1 contra Olajuwon, colocó diferentes defensores, pero el pívot nigeriano, en estado de gracia, resultó imparable, por su capacidad de anotar de tan diversas formas. Aparte de su capacidad ofensiva, con tiros a media distancia, reversos, ganchos… Lo recuerdo como alguien que en defensa rebotea y coloca tapones, siendo un inexpugnable muro en su canasta”.
“Olajuwon fue un líder en su equipo, un ejemplo a seguir. Hoy en día continúa enseñando sus magníficos movimientos de espaldas a canasta, ilustres jugadores como el añorado Kobe Bryant o Lebron James, recibieron lecciones de Hakeem, un bailarín de claqué en una pista de baloncesto”.
SERGIO VEGAS Y SHAQUILLE O NEAL
Sergio Vegas es el rookie de nuestro equipo no por novato si no por ser el más joven del quinteto pero, ojo, irradia carácter Baskonia. Escolta con perfil de combo de buen rendimiento igual en el dial (Radio Marca Vitoria) que en Youtube (SergioBasket_vlogs) o comentarista en Radio Vitoria y DAZN, a Sergio y Rubén Gazapo les debemos esa jugoso libro titulado “Memoria Baskonista”. Con él como barbado dos este 5×5 tiene energía extra.
“De los años 80 y 90 en la NBA me quedo con Shaquille O’neal por su mezcla perfecta entre potencia y velocidad, su capacidad de pase para la altura que tenía y por ser el último gran cinco que ha dominado la NBA a pesar de que solo consiguió un premio MVP en Temporada Regular. Su carisma, por supuesto, es otra de sus virtudes”.
“En sus primeros años en Orlando Magic, Shaquille fue capaz de llevar a una franquicia recién llegada a la NBA a unas finales, superando a los Bulls de Michael Jordan. Pero sus mejores años y su gran paso a la élite llegó en Lakers. Durante su etapa en California fue capaz de construir una gran sociedad con Kobe Bryant y erigirse en un jugador absolutamente dominante”.
EN DATOS. Sergio Vegas detalla:
“Al margen de sus tres anillos, Shaquille se convirtió en el center más temido de la NBA, sin antídoto posible a su terrible juego en la pintura y a su mezcla de potencia y velocidad. Además, uno de los aspectos que menos se tiene en cuenta de su juego es su capacidad de pase, con medias por encima de las 3 asistencias”.
“Finalmente, sus últimas temporadas a gran nivel fueron en Miami Heat, donde logró un anillo y fue un magnífico complemento para un emergente Wade. Desde su retirada, ningún jugador interior ha logrado un dominio similar desde esa posición. Actualmente, dentro de la NBA, me quedaría con Joel Embiid y Nikola Jokic, porque ambos mantienen un físico de cinco clásico, pero han sido capaces de reinventar la posición”.
Por Xabier Sanmartín Cuevas, periodista autor del libro “Aquellos Maravillosos Aros” [63 reportajes sobre grandes del baloncesto de los años 80 y 90 de ACB, NBA… más 63 opiniones invitada], con segunda edición ampliada y revisada.
https://libros.com/comprar/aquellos-maravillosos-aros/
Redactor · Artículos de opinión
twitter: @xabisanmartinc