Y tras un año apasionante volvemos a una nueva final four, donde esta vez se celebrará en la ciudad vitoriana, y donde nos ofrecerá un derbi otomano de máxima tensión. Dos equipos que se conocen a la perfección, aunque a nivel EuroLiga es un duelo desigual, que enfrentará a un Fenerbahce acostumbrado a estas alturas de temporada, ante un Anadolu Efes, que solo ha disputado dos final four en su historia, y esta su primera en el actual formato de EuroLiga
Fenerbahce
A pesar de que cada año muchos de sus jugadores se han ido a la NBA el Fenerbahce se las ingenia para mantener un proyecto que lleva en lo más alto desde el 2015. Desde aquella no se han perdido una final four, ganaron la EuroLiga del 2017 y son los actuales subcampeones. Este año han dominado la regular, terminaron con un balance de (25-5), y siendo prácticamente todo el año líder de la competición, y en los playoffs no tuvieron demasiados problemas para vencer al Zalgiris Kaunas por (3-1).
Un proyecto muy sólido donde sobre todo destaca la labor de su entrenador Zeljko Obradovic, historia viva de la EuroLiga con sus 18º final four con cinco equipos distintos, que lidera a un equipo formado a su imagen y semejanza de lo que entiende que tiene ser el baloncesto. Aderezado todo esto con un bloque de grandes jugadores que le permitirán a buen seguro, optar al título en la que será su quinta final four consecutiva.
Obradovic no es nada amigo de quintetos titulares, coloca su jugadores en virtud de su rival. El más utilizado es con Ali Muhammed (10 puntos 2 asistencias) siempre una amenaza con el balón en sus manos, Erick Green (5 puntos 1 rebotes), Nikola Kalinic (10 puntos 3 rebotes) un hombre vital por su juego en ambos aros, Nicolo Melli (7 puntos 4 rebotes) el único titular indiscutible en este equipo, y Ahmet Duverioglu (3 puntos 3 rebotes) un cinco siempre atento a lo que le pida su entrenador.
Como en otros equipos parece que el Fenerbahce se deja a parte de sus mejores jugadores para la segunda línea, conscientes de la importancia de tener una rotación al mejor nivel para los 40 minutos. Por eso en el Fenerbahce nos encontramos un cinco que podría ser el titular de cualquier equipo de nivel final four, con Kostas Sloukas (12 puntos 5 asistencias) seguramente uno de los bases más determinantes del momento, Marko Guduric (10 puntos 2 asistencias) un tirador letal y con buen tono defensivo, Melih Mahmutoglou (5 puntos), Luigi Datome (9 puntos 4 rebotes) un alero completísimo y que por una lesión es duda para la F4, y por dentro una pareja de altos vuelos con Jan Vesely (13 puntos 5 rebotes) uno de los interiores más verticales de Europa, y Joffrey Lauvergne (9 puntos 4 rebotes).
Un verdadero equipazo, liderado por un maestro, y con uno de los proyectos más sólidos del momento. Son aspirantes a todo. Aunque todo ha quedado en un cierto suspenso ante la posibilidad de que el Fenerbahce llegue a la gran cita con hasta cuatro lesionados, y además todos ellos de gran identidad, como Kalinic, Datome, Vesely y Lauvergne. En caso de que los cuatro no pudieran jugar está claro que será una circunstancia a tener muy en cuenta.
Anadolu Efes
Los turcos han armado un muy buen equipo, lleno de estrellas en todos sus puestos. Gracias a ello el Anadolu han subido un peldaño en su estatus, y tras 19 años de sequía los turcos estarán en una final four, la primera vez en el actual formato. En la regular pocas veces bajaron del cuarto lugar y terminaron con un (20-10) de balance, y en los playoffs tuvieron la capacidad para eliminar a un Barcelona al alza (3-2).
Y es que tener calidad y cantidad ayuda a esta gran mejoría. Por fuera Micic, Larkin, Simon y Beaubois son siempre una amenaza constante, y por dentro Dunston, Moerman y Pleiss ofrecen mucha solidez cerca del aro, una combinación que los puede llevar definitivamente a la élite de la máxima competición.
De inicio Ataman suele salir con un quinteto bastante habitual, con Vasilije Micic (12 puntos 6 asistencias) jugado su mejor baloncesto de siempre, Rodrigue Beaubois (10 puntos 2 asistencias) dando grandes dosis de puntos por fuera, Krunoslav Simon (10 puntos 4 rebotes) un habitual del Efes, y su pareja interior Adrien Moerman (13 puntos 6 rebotes) a un nivel espectacular, y Bryant Dunston (9 puntos 5 rebotes) clave desde la defensa.
En el banquillo Shane Larkin (12 puntos 3 asistencias) capaz de poner cualquier partido patas arriba en pocos minutos, Dogus Balbay (2 puntos 2 asistencias) dispuesto a ayudar en lo que haga falta, James Anderson (5 puntos 2 rebotes) jugando más en favor del equipo que en el suyo propio, y por dentro Brock Motum (7 puntos 2 rebotes) y Tibor Pleiss (9 puntos 4 rebotes).
Un equipo capaz de jugar un baloncesto alegre, contundente, anotador y muy físico si así hace falta. Ahora en la final four se encontrará con un rival muy conocido, ya que ellos y el Fenerbahce son archienemigos en su liga doméstica, la BSL turca. En la EuroLiga esta temporada se han enfrentado dos veces en la regular, con un balance de (1-1), que augura una semifinal de infarto en la cancha y en la grada. Vitoria se convertirá en unas horas en una pequeña Estambul.
Foto: euroleague media
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