El nuevo entrenador del Zalgiris Kaunas, Kazys Maksvytis, querrá canalizar el espíritu del equipo de la temporada 2018-19, cuando Saras Jasikevicius lo guió por última vez a la postemporada. Aunque eso nunca es una tarea fácil, el equipo mejoró su plantilla en todos los aspectos, mientras que los aficionados del Zalgirio Arena son conocidos por crear un ambiente eléctrico. Todo ello debería estimular a los jugadores en lo que esperan sea una campaña mágica
BACKCOURT
Lukas Lekavicius fue uno de los jugadores más fiables del Zalgiris la pasada temporada, y el director de juego con su característico flotador debería seguir teniendo un papel importante, aunque el backcourt está tan lleno de talento como siempre. Keenan Evans llega procedente del Maccabi Playtika Tel Aviv, donde debutó en la Euroliga la pasada temporada. Una de las tareas más importantes para el entrenador Maksvytis es conseguir que estos dos combo-guards estén sincronizados lo antes posible. El veterano base Mantas Kalnietis, que promedió 5,9 puntos en la Euroliga la pasada temporada, también formará parte de la plantilla y debería aportar una voz tranquilizadora en el vestuario tras la retirada del capitán Paulius Jankunas. El Zalgiris también ha traído a casa a varios jugadores lituanos del extranjero. Dovydas Giedraitis llega procedente del Estudiantes de Madrid de España, aunque la pasada temporada estuvo cedido en el Lietkabelis Panevezys de Lituania, con el que disputó la 7DAYS EuroCup. Tomas Dimsa regresa al Zalgiris, donde pasó por las categorías inferiores antes de pasar dos temporadas en el primer equipo. El año pasado jugó con el Treviso en la Liga italiana. El alero Ignas Brazdeikis, de 23 años, nacido en Kaunas pero que se trasladó a Canadá a una edad temprana, está preparado para jugar profesionalmente en Europa por primera vez y hay muchas esperanzas puestas en el internacional lituano. Completan las opciones del backcourt del Zalgiris el joven escolta Liutauras Lelevicius y Karolis Lukosiunas, que tratará de mejorar su rendimiento de la temporada pasada, cuando entró en la rotación por primera vez en su joven carrera.
FRONTCOURT
El equipo tendrá un aspecto muy diferente en el frontcourt. Arnas Butkevicius fue el MVP de la liga lituana la pasada temporada con el archienemigo del Zalgiris, el Rytas Vilnius. El Zalgiris incorporó a Rolands Smits procedente del FC Barcelona, donde sólo fue titular en 21 de sus 107 partidos de Euroliga en las últimas cuatro temporadas. Smits tiene ahora la oportunidad de mostrar su talento en un papel más destacado con el Zalgiris. En el centro, Zalgiris acordó un acuerdo con una de las estrellas de la EuroCup 2021-22: Kevarrius Hayes. Después de brillar con el Frutti Extra Bursaspor durante su carrera de cenicienta hasta la final de la EuroCup el año pasado, tiene la oportunidad de demostrar que sus escépticos en la EuroLeague están equivocados, después de un decepcionante paso por el LDLC ASVEL Villeurbanne en 2020-21. Laurynas Birutis vuelve a Lituania tras jugar con el Obradoiro de España y promediar 13,1 puntos en la Liga española, además de 4,8 rebotes. De la pasada campaña 2021-22 se mantienen los aleros Tyler Cavanaugh y Edgaras Ulanovas, que promediaron 9,7 puntos y 8,1 puntos en la Euroliga, respectivamente. Habrá más competencia para estos dos en la próxima temporada, pero están encerrados en papeles clave. Motiejus Krivas, de 17 años, completa el frontcourt.
JUGADOR A SEGUIR
En Lituania ya se está generando mucha expectación en torno a Ignas Brazdeikis, que ha impresionado con la selección nacional este verano. Al no haber jugado antes fuera de Norteamérica, es posible que al principio de la temporada Brazdeikis tenga que aclimatarse al baloncesto de clubes europeo y a las exigencias de la Euroliga, pero su impacto debería empezar a notarse a medida que avance la campaña. Conocido como alguien que puede llegar al aro y hacer cortes decisivos, además de tener un montón de energía y la capacidad de golpear tres puntos, Brazdeikis es un jugador que los aficionados del Zalgiris sin duda disfrutarán viendo desde el primer día.
PERSPECTIVA
A pesar de la decepcionante campaña del año pasado, la llegada de la nueva temporada trae consigo muchas esperanzas y expectativas para el Zalgiris. Se han realizado algunas incorporaciones muy inteligentes en la plantilla del equipo y, con su apasionada afición en el Zalgirio Arena dispuesta a animar en las buenas y en las malas, hay muchos motivos para estar ilusionados en Kaunas. El equipo jugará tres de sus cuatro partidos en casa en un tramo clave de la temporada, entre las jornadas 3 y 6, y una buena racha allí podría marcar la pauta en el futuro.
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