Todo se decidirá en Madrid (76-76)

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Imposible que una eliminatoria quede más abierta, tras algo tan retro como un empate: 76-76. Movistar Estudiantes lo pasó mal en el partido de ida en cancha del campeón holandés Donar Groningen, con un mal día en el tiro y mejorable en ataque, y tuvo que tirar de garra y calidad individual para que todo tenga que decidirse el lunes a las 20:30h en el WiZink Center

Cook, Peña, Landesberg, Suton y Arteaga compusieron el primer quinteto titular de la temporada 2017-18 de Movistar Estudiantes. El exilio en una cancha que no era la habitual no sentó mal al campeón holandés Donar Groningen, que espoleado por su afición tomó las primeras ventajas (11-5, minuto 5).

Sylven Landesberg lideró la reacción para dar la vuelta al marcador en apenas un minuto (11-12), que llegó a ser un 11-16 tras triple de Cook. Pero los holandeses agitaban el trapo del juego alocado al que el Estu entró como un Mihura, y en esas circunstancias el equipo que llega más rodado lo hace mejor: 18-16 para cerrar el primer cuarto tras un triplazo sobre la bocina de Domingo.

Movistar Estudiantes seguía muy fallón en el arranque del segundo cuarto, pero lo cierto es que Groningen no le iba a la zaga en unos espesos minutos de correcalles: 24-24 mediado el periodo, con más tiros errados que anotados. Empezaron a entrar los tiros, especialmente los de tres, y la cosa se puso algo vistosa, con cortas ventajas para los de casa (35-31).

Aunque Movistar Estudiantes siempre acababa encontrando algún buen tiro (Suton o Cook de tres, Caner-Medley bajo canasta…) Donar respondía con rapidez al contraataque. Eso pasó hasta en la última jugada antes del descanso: canasta de Curry para el 41-40.

Tras el paso por vestuarios, la defensa estudiantil mejoró, pero sin embargo la pólvora seguía mojada, especialmente cuando se disparaba desde más allá del 6.75. Sylven Landesberg era la única vía de anotación en estos compases, mientras que en Donar encontraban varias opciones más para tomar ventaja: 50-45.

Movistar Estudiantes seguía insistiendo de tres y los holandeses, de dulce, dijeron “pues nosotros también”. Y con dos seguidos pusieron la máxima ventaja, que obligaba a Salva Maldonado a pedir tiempo muerto: 56-48. Caner-Medley y el junior Adams Sola fueron los ingredientes para recortar diferencias y llegar al final del cuarto con 61-57.

Hakanson, Peña, Vicedo, Caner-Medley y Savane iniciaron el último periodo, en el que las cosas iban de cara para los locales, que encontraban el aro con más facilidad (70-63). Movistar Estudiantes, sin tener precisamente su mejor día, no daba ningún balón por perdido y no se rendía.

Apretando en defensa y corriendo al contraataque, los colegiales lograron un parcial de 7-0 protagonizado por Landesberg y Brizuela para empatar a 70 a falta de 3:18. ¿Empezaba un partido nuevo?

Contra los nervios, veteranos, porque el partido se convirtió en un autentico thriller. El ex Bilbao y Obradoiro Pasalic se hacía fuerte bajo los aros para Groningen, pero Omar Cook demostraba sus tablas sin temblarse el pulso desde más allá de la línea de tres (74-73). Un mate de Bruinsma complicaba las cosas, pero un triple de Nik Caner-Medley tras rebote de Cook empataba el partido a 76 a falta de 31 segundos.

Tanto Movistar Estudaintes como Donar Groningen tuvieron ocasiones en esos últimos segundos de llevarse el gato al agua, pero se ve que había ganas de tener un partido vintage y dejar todo abierto para el lunes a las 20:30h en el WiZink Center: 76-76 al final de los primeros 40 minutos de la eliminatoria.

Nota de prensa Movistar Estudiantes • Foto: FIBA