El Madison Square Garden fue testigo de una noche inolvidable, cuando Jalen Brunson lideró una impresionante remontada de los New York Knicks frente a los Detroit Pistons en el primer partido de la serie de playoffs. Los Knicks superaron una desventaja de ocho puntos en el tercer cuarto para desatar un parcial de 21-0 que terminó por hundir a los Pistons y sellar el triunfo por 123-112
Aunque el encuentro comenzó en tono complicado para los Knicks, Brunson encarnó el papel de líder en los momentos más oscuros. Después de abandonar brevemente el partido tras parecer molestar su tobillo derecho (ya lesionado previamente), regresó con fuerza para anotar 34 puntos y ser el motor de una ofensiva que dejó sin respuesta a Detroit. Cam Payne también brilló en el cuarto periodo, anotando 11 de sus 14 puntos en momentos clave, mientras que Karl-Anthony Towns y OG Anunoby añadieron 23 puntos cada uno para consolidar el esfuerzo colectivo.
Los Pistons, que estaban a punto de romper su récord de 14 derrotas consecutivas en playoffs desde 2008, tenían ventaja de 98-90 con menos de diez minutos por jugar. Pero la tormenta ofensiva de los Knicks fue implacable, impulsada por la velocidad, las transiciones rápidas y la agresividad en defensa. Cada error de Detroit era castigado con canastas en el otro extremo, haciendo rugir a un Garden que pasó del silencio a la euforia en cuestión de minutos.
La racha de los Knicks comenzó con un jugada de tres puntos de Payne, seguida de una anotación de Brunson y un triple de Payne que empató el partido a 98. El dúo combinó para 17 de los 21 puntos de la racha, antes de que Josh Hart cerrara con dos canastas que dieron una ventaja decisiva de 111-98. “Llevo esperando este momento toda la temporada,” afirmó Payne, quien aprovechó la oportunidad para demostrar su valía.
Tobias Harris lideró a los Pistons con 25 puntos, pero se apagó en la segunda mitad con solo tres anotaciones. Cade Cunningham, en su debut en playoffs, registró 21 puntos y 12 asistencias, pero fue limitado a un pobre 8 de 21 en tiros por la defensa férrea de los Knicks. A pesar de su buen inicio, Detroit se derrumbó bajo la presión de los minutos finales, demostrando que aún le falta experiencia para competir en esta etapa.
Brunson, en su regreso tras una lesión que lo mantuvo fuera por 15 partidos, ejemplificó el espíritu combativo de los Knicks.
Por su parte, los Pistons tendrán que reagruparse y aprender de la derrota si desean evitar otra eliminación temprana en la postemporada. La lucha continúa, pero Nueva York ya dejó claro que no cederá terreno fácilmente.
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